Desde las altas cumbres de los Pirineos hasta el valle que forma el río Asón, el patrimonio cultural e histórico de Arredondo sorprende al viajero gracias a todos sus encantos y a su impresionante paisaje kárstico.
Esto lo convierte en un punto de interés tanto para los amantes de la naturaleza como para los aficionados a la espeleología. Pero esto no se queda aquí, pues entre sus calles se pueden contemplar monumentos de gran valor que son dignos de visitar.
De este modo, esta localidad situada en el puerto de Alisas y bañada por el río Asón, emerge como un destino rural imprescindible en Cantabria. Además, cuenta con un sobrenombre muy merecido y que muchas ciudades del mundo desearían tener, pues es también conocida como la «capital del mundo».
Un pintoresco conjunto monumental
La “capital del mundo», es un apodo que se encuentra inscrito en una placa de cerámica adosada a una casa a la entrada del pueblo y hace referencia a la gran cantidad de indianos que partieron desde estas tierras a buscar fortuna a América. De hecho, uno de sus monumentos más emblemáticos, la iglesia neoclásica, fue construido en 1860 por el indiano Antonio Gutiérrez Solana.
Esta se encuentra flanqueada por la imponente torre, la cual es visible desde cualquier punto del pueblo. A estas construcciones hay que sumar la ermita rupestre de San Juan de Socueva que fue erigida en el siglo X y está considerada como el primer referente histórico de Arredondo. Además, en su interior se puede apreciar un altar visigodo y otras estancias eclesiásticas. Merece igualmente una visita la ermita de los Santos Mártires, de estilo gótico y levantada en el siglo XVI.
Por otro lado, las fiestas locales, como la celebración de San Juan, ofrecen una oportunidad única para descubrir las costumbres y el modo de vida de los vecinos del pueblo, así como para disfrutar de la gastronomía local, que se caracteriza por platos basados en productos de la tierra y el ganado.
Un paraíso para la espeleología
El otro gran atractivo de la villa es su entorno natural el cual destaca por ser uno de los mejores para los amantes de la espeleología. Así, destaca la cueva de Coventosa, la cual, junto con junto con otras como la Cueva del Valle, forma parte de un complejo sistema kárstico que se ha formado a lo largo de miles de años.
Está formado por alrededor de 250 cuevas catalogadas y sistemas como el de Cueto-Coventosa, que es el tercero más largo de Cantabria. Además, el río Asón, con su impresionante cascada, ofrece una de las imágenes más emblemáticas del municipio, constituyendo un espectáculo natural especialmente relevante durante el deshielo primaveral.
Fuente: www.infobae.com