El empleo en el sector turístico de España alcanzó un nuevo hito durante el tercer trimestre de 2024, superando por primera vez los tres millones de trabajadores. Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados por Turespaña, el número de ocupados en el sector creció en 67.231 personas en comparación con el mismo periodo del año pasado, totalizando 3.019.064 empleados. Esta cifra refleja una sólida recuperación y expansión del empleo en el sector.
Entre julio y septiembre, la economía española sumó 557.000 nuevos empleos en comparación con el año anterior, de los cuales el 12,1% correspondió a nuevas contrataciones en el turismo. Además, la tasa de paro general se mantuvo estable en 8,1%, igualando la cifra de 2023, lo que posiciona al sector turístico con una tasa de desempleo inferior a la media nacional de 11,2%.
El crecimiento fue especialmente notable en varias áreas del sector. La hostelería experimentó un aumento del 3,3%, impulsada por un repunte tanto en los servicios de comida y bebida (3,9%) como en el alojamiento (1,8%). En el transporte de viajeros, el incremento fue del 9,2%, mientras que las agencias de viaje experimentaron un descenso del 11,7%.
Los asalariados fueron los que más aumentaron, con un incremento del 2,3%, alcanzando los 2.550.911 trabajadores. Este crecimiento se reflejó principalmente en el transporte de viajeros (7%) y en la hostelería (3,4%). Además, el empleo con contrato indefinido continuó su tendencia positiva, aumentando un 4,3% y consolidando una mejora en la calidad del empleo en el sector.
Las comunidades autónomas también registraron avances en la contratación, especialmente en Cataluña (+9,4%), Andalucía (+0,2%), Madrid (+8,8%) y la Comunidad Valenciana (+3,6%). Cantabria y Castilla y León destacaron con los mayores incrementos interanuales, con un 16,6% y 11,5%, respectivamente. Sin embargo, algunos territorios, como Baleares, Galicia, y el País Vasco, no experimentaron aumentos significativos.
Este crecimiento demuestra una tendencia hacia una mayor descentralización del empleo turístico, con nuevas oportunidades en regiones del norte y del interior del país, destacándose por la diversificación y expansión del sector en España.