Crescent Heights, reconocida desarrolladora inmobiliaria, presentó Crescent Seas, un innovador concepto de residencias de lujo en alta mar. Dirigido a viajeros que buscan exclusividad, este modelo traslada la experiencia de vida en yates a una comunidad flotante de alto nivel.
El proyecto debutará con el Navigator, embarcación de Norwegian Cruise Line Holdings Ltd. que será sometida a una renovación de más de 50 millones de dólares. Tres firmas de diseño de prestigio —Lissoni & Partners, Journey y MAWD— trabajan en la remodelación, que incluirá 210 residencias con precios desde 750,000 hasta 8 millones de dólares. Entre sus servicios se destacan mayordomos de lujo y conexión a internet Starlink, permitiendo a los residentes trabajar o estudiar en cualquier parte del mundo.
Las ventas se abrirán al público el 9 de abril en una galería en Miami, y el Navigator zarpará en su viaje inaugural en diciembre de 2026. Crescent Seas planea sumar cuatro barcos residenciales de lujo en los próximos cinco años.

Experiencia exclusiva y destinos únicos
A diferencia de los cruceros tradicionales, los residentes de Crescent Seas recorrerán el mundo en travesías prolongadas, con escalas de 2 a 3 días en cada destino. Entre los puntos destacados se incluyen la Polinesia Francesa, las Islas Feroe y Madagascar.
Russell W. Galbut, socio fundador de Crescent Heights y referente de la industria de cruceros, destacó: “Los viajeros nos decían que querían más que unas vacaciones; querían vivir este estilo de vida. Con Crescent Seas, ofrecemos la posibilidad de llamar hogar a los destinos más emblemáticos del mundo”.
El barco seguirá siendo operado por su tripulación actual y contará con la excelencia en hospitalidad de The Apollo Group, empresa con más de 50 años de experiencia en la industria de cruceros.
El proyecto es respaldado por GFO Investments, firma global de inversión de la familia Galbut, que apuesta a revolucionar la experiencia residencial en el mar con este innovador concepto.