En el ámbito turístico, donde el empleo alcanza a más de 2,9 millones de personas solo en España, contar con una nómina correctamente elaborada es fundamental para garantizar una buena gestión de recursos humanos. Este documento no solo asegura el cumplimiento legal y fiscal, sino que también fomenta la confianza y motivación entre los trabajadores.
Una nómina bien estructurada debe incluir cinco bloques fundamentales:
Encabezado: con los datos identificativos de la empresa (nombre, CIF, cuenta de cotización) y del trabajador (nombre, DNI, categoría profesional, fechas trabajadas).
Devengos: retribuciones salariales (salario base, complementos, horas extras) y no salariales (dietas, indemnizaciones), que suman el salario bruto.
Deducciones: cotizaciones a la Seguridad Social, IRPF y otras posibles deducciones como anticipos o embargos.
Bases de cotización: que determinan las prestaciones sociales y deben calcularse con precisión.
Pie de nómina: donde se resume el líquido a percibir, número de cuenta, fecha de ingreso y firma.
El uso de herramientas como plantillas digitales en PDF o software especializado, como los que ofrece Factorial, permite reducir errores y automatizar procesos, siendo una ventaja clara frente al uso de hojas de cálculo tradicionales.
En un sector con alta rotación y estacionalidad como el turismo, garantizar una nómina clara, comprensible y puntual no solo es una obligación legal, sino una herramienta clave de fidelización del talento.