El Ayuntamiento de La Coruña llevará al Pleno una nueva ordenanza fiscal para regular la tasa municipal sobre el impuesto autonómico de estancias turísticas. Esta iniciativa busca afrontar el aumento de los costes en los servicios públicos, derivados del crecimiento sostenido del turismo en la ciudad.
La alcaldesa, Inés Rey, explicó que la medida no busca gravar el turismo, sino garantizar el equilibrio financiero de los servicios. “Es posible disfrutar de la ciudad y, a la vez, ser conscientes de que contar con servicios públicos es posible porque los pagamos entre todas y todos”, señaló.
En 2024, La Coruña estuvo cerca de alcanzar el millón de turistas, una cifra que contrasta con los 750.000 registrados en 2022. El recargo municipal oscilará entre 1 y 2,5 euros por noche, dependiendo del tipo de alojamiento y su categoría. Para los cruceros, la tasa se aplicaría a partir de 2026, a menos que la Xunta modifique la normativa.
La ordenanza también contempla exenciones para estancias por motivos de salud, deportistas federados, menores no emancipados, personas con discapacidad superior al 65%, beneficiarios de programas sociales de la UE, peregrinos del Plan Xacobeo y ciudadanos alojados por reformas en sus viviendas.
El Pleno debatirá la aprobación inicial de la normativa en junio.
