La Asociación Los Pueblos más Bonitos de España anunció que Alpuente, Oseira, Santa Gadea del Cid y Vilanova dos Infantes serán los municipios que se incorporarán a la red a partir de 2026, tras superar el riguroso proceso de evaluación que distingue a esta entidad.
El anuncio se realizó en la XIII Asamblea Nacional, celebrada en Santillana del Mar (Cantabria), donde la comisión de calidad presentó los resultados de las auditorías realizadas durante el año. Además de definir las nuevas incorporaciones, la Asociación resolvió abrir un expediente de expulsión para uno de los pueblos que hoy integran la red, siguiendo los criterios internos de calidad.
Durante la asamblea, los representantes municipales repasaron las actividades del año, presentaron proyectos y debatieron sobre desafíos actuales del mundo rural, especialmente vinculados a financiación, vivienda y sostenibilidad del patrimonio.
El presidente de la Asociación, Francisco Mestre, destacó que, entre todas las candidaturas presentadas, solo cuatro localidades lograron superar el proceso de auditoría: “En nuestra red prima la calidad por encima de la cantidad. Cada incorporación debe cumplir plenamente con los valores que representamos”. También celebró la diversidad que aportan estos nuevos destinos y su compromiso con la excelencia.
Los cuatro nuevos pueblos de 2026
Alpuente (Valencia)
Primer municipio valenciano en ingresar a la red, se distingue por su casco medieval, su castillo andalusí, el antiguo acueducto, un notable yacimiento de icnitas de dinosaurios y un museo paleontológico de referencia. Enclavado en un paisaje serrano, combina patrimonio e identidad rural.
Oseira (Ourense)
Reconocida por el imponente Monasterio de Santa María de Oseira, uno de los grandes referentes del Císter en España, construido entre los siglos XII y XVI. Su entorno de montaña, sereno y armonioso, potencia un conjunto donde espiritualidad y paisaje conviven con naturalidad.
Santa Gadea del Cid (Burgos)
Villa de origen medieval que conserva un conjunto urbano homogéneo. Su iglesia-fortaleza del siglo XIV domina el caserío, acompañada por casas blasonadas y restos del antiguo recinto defensivo. Es un ejemplo destacado de preservación patrimonial en el nordeste burgalés.
Vilanova dos Infantes (Ourense)
Pequeña y cargada de identidad, está marcada por la Torre da Homenaxe, símbolo medieval del poblado. Sus calles empedradas, su arquitectura tradicional y la devoción a la Virxe do Cristal convierten este núcleo en un reflejo vivo de la esencia rural gallega.


