La inteligencia artificial dejó de ser una promesa de futuro para convertirse en una condición indispensable de competitividad. Así lo aseguró Jon Hernández, divulgador especializado en IA, durante su participación en el Congreso de Hoteleros de Cartagena, donde advirtió que “las empresas que no adopten la IA generativa en los próximos dos años no podrán competir”.
Hernández señaló que la irrupción de herramientas como ChatGPT marcó un antes y un después en la forma de trabajar de las empresas. “Estamos atravesando un cambio cultural profundo sobre cuál es el valor del trabajo humano. No se trata solo de tecnología, sino del mayor proyecto de infraestructura de la historia”, sostuvo.

El especialista advirtió que la evolución de la IA será extremadamente rápida y traerá impactos directos en el empleo, con proyecciones de hasta 800 millones de puestos afectados por la automatización hacia 2030. Sin embargo, subrayó que también se generará más trabajo, aunque con menos empleo tradicional.
Como ejemplo de adopción exitosa, mencionó el caso de Marriott International, que ya aplica IA en su sistema de búsquedas: el usuario ya no indica a dónde quiere ir, sino qué desea hacer. Esto permitió duplicar las búsquedas guardadas y aumentar significativamente el tráfico web en apenas tres meses.
De cara a 2026, Hernández anticipó el avance de la denominada “IA agéntica”, con agentes capaces de planificar, ejecutar tareas y tomar decisiones. En ese escenario, según los expertos, el turismo avanzará hacia un modelo B2AI, donde la máquina será también cliente, cambiando por completo la lógica de comercialización, distribución y comunicación.


