Bolivia anunció la eliminación del requisito de visado para ciudadanos de ocho países, entre ellos Estados Unidos, Israel y Emiratos Árabes Unidos, con el objetivo de recuperar la llegada de turistas y mejorar la actividad económica ligada al sector. El presidente Rodrigo Paz explicó que la exigencia de este trámite había generado más perjuicios que beneficios para el país.
Según el mandatario, Bolivia dejó de recibir más de 80 millones de dólares debido a la aplicación de visados, una política que, lejos de favorecer el control migratorio, terminó alejando a visitantes internacionales. Mientras Bolivia registró 650.000 turistas en 2024, países vecinos como Perú alcanzaron los 3,5 millones, pese a haber tenido niveles similares tres décadas atrás.
La ministra de Turismo, Cintya Yáñez, agregó que las restricciones aplicadas desde 2007 a ciudadanos de Estados Unidos y, desde 2014, a viajeros israelíes provocaron una pérdida acumulada cercana a 900 millones de dólares en ingresos turísticos.
La exención de visado se aplicará también a visitantes procedentes de Corea del Sur, Sudáfrica, Bulgaria, Malta, Rumanía y Emiratos Árabes Unidos, con el fin de facilitar su ingreso al país y reforzar la competitividad de Bolivia como destino.


