Las agencias de viajes ya trabajan en paquetes turísticos para el Mundial de Fútbol 2026, incluso hacia el Caribe mexicano, a pesar de que aún no se conocen las sedes de los equipos y resulte una jugada anticipada. Así lo señaló Julián Balbuena Alonso, consejero de Amatur y exlíder de Bestday.
Según explicó, el interés crece en México y especialmente en Cancún, el único destino en el mundo con conectividad aérea directa hacia todos los estadios y sedes del torneo. Este factor lo posiciona como una alternativa atractiva para viajeros de diferentes países.
Balbuena indicó que Quintana Roo ya cuenta con dos centros oficiales de hospedaje para selecciones de la FIFA y que varias delegaciones importantes han mostrado interés. “Conozco un par de agencias que están preparando paquetes, sobre todo de corte VIP; será un mundial así, porque los boletos son muy caros y las experiencias están lejos del alcance de muchos”, apuntó.
Según detalló, los paquetes que incluyen boletos pueden costar entre tres mil y cincuenta mil dólares, ya que contemplan accesos preferenciales, salas con servicio de catering, bebidas y otras comodidades.
Explicó que la mayoría de las agencias espera conocer la ubicación de los equipos más atractivos para el destino, especialmente para viajeros sudamericanos, nacionales y europeos.
Agregó que muchos turistas optarán por hospedarse en Quintana Roo y viajar en vuelos directos a los partidos. Este tipo de experiencias de un día —salir temprano, asistir al encuentro y regresar por la noche— podría ser una solución ante los altos costos de alojamiento en algunas sedes.
Aunque reconoció que el movimiento puede parecer apresurado, señaló que para muchos resultará conveniente evitar estancias dobles en destinos costosos y aprovechar la conectividad de Cancún.
El Aeropuerto Internacional de Cancún se posiciona como punto clave para los más de 150 mil aficionados ingleses que llegarán a México, según datos recientes de Pablo Casas, subsecretario de Promoción de Sedetur. Las autoridades ya coordinan temas de ocupación hotelera, asistencia consular, atención al visitante y protocolos de seguridad junto a representantes británicos.
