American Airlines solicitó al Departamento de Transporte de EE. UU. (DOT) una ampliación de la suspensión de varios vuelos entre Miami y Cuba durante el verano, debido a una caída sostenida en la demanda. La aerolínea atribuye esta baja al impacto de las restricciones impuestas durante la administración Trump.
De ser aprobada la solicitud, se suspenderán hasta tres de los ocho vuelos diarios entre Miami y La Habana, y cuatro vuelos los martes y miércoles. Además, se eliminaría la conexión directa entre Miami y Santiago de Cuba, dejando a esta ciudad sin vuelos directos desde EE. UU.

American mantendrá, sin embargo, sus operaciones hacia Camagüey, Holguín, Matanzas/Varadero y Santa Clara. La compañía justificó la decisión en los “desafíos persistentes” para recuperar la demanda de pasajeros entre ambos países, incluso en temporada alta.El contexto político también influye: Donald Trump planea restaurar restricciones migratorias y de viaje a países como Cuba y Venezuela, lo que afecta directamente la conectividad aérea y el flujo turístico entre Estados Unidos y la isla.