Como parte de una estrategia para fortalecer la conectividad y abrir el mercado aeronáutico, el Gobierno argentino anunció que el Aeródromo de Sauce Viejo en Santa Fe pasará a ser un aeropuerto internacional. La Resolución 489/2024, publicada en el Boletín Oficial y firmada por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), permite que aviones de matrícula extranjera operen desde y hacia este aeródromo, en línea con la política de “cielos abiertos” y la desregulación del servicio aeronáutico.
La decisión incluye la incorporación de servicios de aduana, migración, sanidad y seguridad aeroportuaria, en coordinación con el Ente Autárquico Aeropuerto Sauce Viejo, para cumplir con los requisitos del Código Aeronáutico. Este cambio fue posible tras diversas obras de modernización en el aeródromo, como la ampliación de su pista de 2300 metros y la renovación de áreas de espera, arribo, baños y otras instalaciones. Sauce Viejo se une ahora a otros aeropuertos de la región, como los de Rosario y Paraná, con miras a competir en el mercado de vuelos internacionales y atraer nuevas aerolíneas.
La secretaria de Transporte de Santa Fe, Renata Ghiloti, destacó las oportunidades que esta medida representa para el desarrollo de cargas y conexiones internacionales. “Estamos trabajando para sumar vuelos a Paraguay y Uruguay, y queremos que empresas pequeñas con aviones de menor porte puedan ingresar al mercado argentino”, afirmó Ghiloti. Por su parte, Gisela Riuli, directora del Aeropuerto Sauce Viejo, mencionó el interés en atraer vuelos estacionales hacia Brasil y Centroamérica, con el fin de impulsar el turismo en la región.
Este anuncio se suma a una serie de políticas de desregulación, como el Decreto 809/2024, que actualiza el reglamento de contrato aéreo para equilibrar derechos de pasajeros y empresas, y la Resolución 816/2024, que endurece las sanciones para quienes incumplan regulaciones o brinden información falsa. En septiembre también se reglamentó la esencialidad del servicio aéreo, asegurando un nivel mínimo de operación durante paros gremiales. Con estas medidas, el Gobierno busca fortalecer el sector aeronáutico, ampliando la oferta de servicios y conectividad en Argentina.