Barcelona da un paso firme hacia un modelo turístico más equilibrado. En el marco de la inauguración oficial de la nueva terminal de MSC Cruceros en el Puerto de la ciudad, autoridades locales y representantes del sector privado ratificaron su compromiso para mitigar los efectos del turismo de masas, apostando por una experiencia más sostenible tanto para quienes visitan como para quienes viven en la ciudad.
Durante el acto, Pierfrancesco Vago, presidente ejecutivo de la división de cruceros del Grupo MSC, destacó el papel positivo de los cruceristas en la economía local y reafirmó su intención de trabajar en conjunto con la ciudad para mejorar la calidad del turismo sin aumentar la cantidad de visitantes. En esa línea, propuso desestacionalizar las visitas y redistribuir el flujo turístico para reducir su impacto. «Queremos ser parte de la solución, no del problema», afirmó.
Desde el sector público, Jordi Valls, teniente de alcalde de Economía, Finanzas y Turismo, subrayó la necesidad de lograr un equilibrio: «Barcelona debe ser una ciudad linda para visitar, pero también para vivir». Por su parte, el conseller de Presidencia de la Generalitat, Albert Dalmau, recordó que el turismo representa el 15 % del PIB catalán y el 14 % del empleo, y resaltó la importancia de una distribución equitativa de los beneficios que genera el sector.
En cuanto al transporte, el secretario de Estado de Transporte, José Antonio Santano, puso en valor los avances en sostenibilidad logrados gracias a la colaboración público-privada. Remarcó que en 2024 los cruceristas alcanzaron los 12 millones a nivel nacional, con Barcelona liderando el ranking de puertos españoles, recibiendo 3,6 millones de visitantes, un 2,4 % más que el año anterior.
Una terminal modelo: eficiencia energética y diseño sostenible
La nueva terminal de MSC Cruceros, diseñada por el prestigioso estudio Ricardo Bofill Taller de Arquitectura, promete convertirse en un referente en infraestructura turística sustentable. Con capacidad para recibir un barco al día y aproximadamente 190 escalas en 2025, el edificio de tres plantas incorpora paneles solares, materiales ecológicos, sistemas de recolección de agua pluvial y un diseño que maximiza el uso de luz natural.
Además, ha sido reconocida con la certificación LEED Gold, un distintivo internacional que garantiza altos estándares en eficiencia energética y responsabilidad ambiental.
Un hito clave será la implementación de la conectividad eléctrica de tierra a barco, prevista para 2027, lo que permitirá a los cruceros apagar sus motores mientras están en puerto, reduciendo significativamente las emisiones contaminantes.
Este proyecto, fruto de una concesión de 31 años otorgada en 2021 por el Puerto de Barcelona a MSC Cruises Barcelona Terminal, marca una nueva etapa para el turismo de cruceros en la región. Una que apuesta por un futuro más sostenible, consciente y respetuoso con el entorno urbano y natural.