El fabricante estadounidense de aviones Boeing registró en 2024 unas pérdidas de 11.400 millones de euros (11.875 millones de dólares), cifra que quintuplica los 2.222 millones de dólares de pérdidas de 2023. Este resultado negativo se atribuye a problemas como una huelga prolongada y retrasos significativos en la producción, factores que han impactado gravemente los resultados de la compañía.
En el último trimestre del año, Boeing acumuló pérdidas de 3.923 millones de dólares, un contraste notable frente a los 23 millones de pérdidas del mismo periodo en 2023, según comunicó la empresa. Por otro lado, los ingresos anuales alcanzaron los 66.517 millones de dólares, lo que representa una caída del 14 % respecto a 2023. En el cuarto trimestre, los ingresos fueron de 15.242 millones de dólares, un descenso del 30,8 % en comparación con el mismo periodo del año anterior.
A pesar de los números rojos, Boeing destacó la reanudación de la producción en los programas 737, 767 y 777/777X tras finalizar el acuerdo con la Asociación Internacional de Maquinistas y Trabajadores Aeroespaciales (IAM). La empresa señaló que los resultados financieros reflejan los impactos derivados del paro laboral, el acuerdo con IAM, los costes asociados a las reducciones de personal anunciadas previamente y cargos relacionados con ciertos programas de defensa.
Avances en entregas y perspectivas para 2025
En 2024, Boeing entregó 348 aviones comerciales y recibió 279 pedidos netos, incrementando su cartera total de pedidos a 521.000 millones de dólares, que incluye más de 5.500 aviones comerciales.
Kelly Ortberg, presidente y director ejecutivo de Boeing, afirmó que la compañía ha realizado progresos en áreas clave para estabilizar sus operaciones y fortalecer la seguridad y la calidad de sus procesos. Además, Ortberg destacó que el grupo está comprometido con implementar cambios fundamentales para recuperar su desempeño, reconstruir la confianza de sus clientes y satisfacer las expectativas de empleados, proveedores, inversores y reguladores.
