Brasil, hogar de las celebraciones de Carnaval más emblemáticas del mundo, se prepara para una de sus temporadas turísticas más lucrativas. Se estima que el evento generará más de $2,000 millones de dólares en ingresos, consolidándose como un motor clave de la economía y el turismo en el país.
Según la Confederación Nacional Brasileña de Comercio de Bienes, Servicios y Turismo (CNC), los festejos de Carnaval en todo Brasil aportarán aproximadamente R$12,030 millones de reales ($2,080 millones de dólares). Los sectores más beneficiados serán la gastronomía, con una facturación prevista de R$5,400 millones ($935.44 millones de dólares), el transporte, que generará R$3,310 millones ($573.39 millones de dólares), y el alojamiento, con ingresos estimados en R$1,280 millones ($221.73 millones de dólares). Estos sectores representarán el 83% de los ingresos turísticos durante el evento, que se llevará a cabo del 28 de febrero al 8 de marzo.
Las festividades atraerán a más de 868,400 turistas internacionales, superando los 833,300 visitantes del año pasado. Además, el Carnaval impulsará la generación de empleo temporal con la creación de aproximadamente 32,600 puestos de trabajo, de los cuales 22,850 corresponderán a bares y restaurantes, 4,060 al sector hotelero y 3,310 al transporte.
Sin embargo, la tasa de contratación de empleados temporales para puestos a tiempo completo tras el Carnaval ha ido disminuyendo. En 2021 y 2022, alrededor del 24% de los trabajadores fueron contratados permanentemente, mientras que en 2024 la cifra cayó al 9% y se espera que en 2025 descienda al 7%. Este descenso se debe a la estabilización del mercado laboral, que en diciembre registró la tasa de desempleo más baja desde 2012, con un 6.1%.
Alexandre Sampaio, director de la CNC y coordinador del Consejo Empresarial de Turismo y Hostelería (CETUR), destacó la importancia del Carnaval para la economía local: «El Carnaval juega un papel crucial en la generación de empleos temporales, especialmente en ciudades con un alto flujo de turistas. Estos empleos son fundamentales para impulsar la economía regional y atender la gran demanda estacional».
En cuanto a la ocupación hotelera, se prevé que el 87% de las habitaciones en Río de Janeiro estén reservadas, mientras que en São Paulo la cifra alcanzará el 73%. Otras ciudades turísticas de Brasil también esperan operar a su máxima capacidad durante las festividades.
Fabio Bentes, economista de la CNC, subrayó: «La concentración de ingresos en sectores como la alimentación, el transporte y el alojamiento demuestra cómo el Carnaval impacta directamente en la economía local y fortalece el sector servicios».
Este auge económico se produce en medio de un contexto de aumento en los precios de bienes básicos, con incrementos del 14.2% en el costo de una canasta de doce productos entre diciembre de 2023 y 2024. No obstante, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha asegurado que la economía brasileña «vive su mejor momento», con la inflación «totalmente bajo control» y un panorama de crecimiento sostenido que continuará generando empleo y mejorando el nivel de vida de la población.