Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) implementaron nuevas regulaciones para los perros que ingresan a los Estados Unidos, reemplazando una suspensión temporal de 2021 que prohibía la importación de perros de más de 100 países con alta prevalencia de rabia. Estas normas, vigentes desde el 1 de agosto de 2024, responden al creciente número de mascotas transportadas en avión, que supera los 2 millones anuales, y buscan reforzar la seguridad sanitaria.
Entre los requisitos principales, los perros deben tener al menos seis meses de edad, estar en buena salud, y contar con un microchip para su identificación. Además, se exige la presentación de varios documentos, incluyendo un formulario de importación de los CDC y pruebas de vacunación contra la rabia.
Para los perros vacunados en los Estados Unidos, se requiere un certificado validado por el Departamento de Agricultura. En el caso de perros vacunados fuera del país, se necesitan un certificado de vacunación, un análisis de sangre complementario y un examen en un centro aprobado por los CDC al llegar a los EE. UU.
La actualización de estas normativas, la más significativa desde 1956, busca mitigar el riesgo de reintroducción de la rabia, una preocupación creciente debido al aumento de iniciativas internacionales de rescate y la posible falsificación de registros de vacunación. Estas medidas están diseñadas para proteger a la población de mascotas domésticas y preservar los logros en la erradicación de la rabia en Estados Unidos.
