Cada 12 de agosto, los amantes de la música celebran el Día Internacional del Disco de Vinilo, una efeméride que nos invita a recordar y honrar un formato que marcó una era en la historia de la música.
Este día tiene su origen en 2002, en California, cuando un grupo de entusiastas decidió establecer una fecha para preservar y celebrar el legado musical del pasado a través del vinilo.
El disco de vinilo, introducido en 1948, se convirtió en el principal medio de reproducción de música durante las décadas de los 50, 60, 70 y 80. Aunque la aparición del CD-Audio en los años 90 provocó una disminución en su producción, el vinilo ha experimentado un renacimiento, manteniéndose como un formato popular entre los DJs y coleccionistas que valoran su calidad sonora y su autenticidad.
La celebración del Día Internacional del Disco de Vinilo trasciende fronteras, con eventos que se llevan a cabo en diversas ciudades del mundo. En el Reino Unido, el barrio de Soho, conocido por su concentración de tiendas de discos de vinilo, se convierte en el epicentro de un festival de música gratuito que atrae tanto a locales como a turistas. Además, muchas tiendas de música ofrecen descuentos y promociones en vinilos, lo que resulta en una oportunidad única para los nostálgicos de este formato.
En varias ciudades, los aficionados al vinilo se reúnen para intercambiar discos, compartir experiencias y disfrutar de la música de una manera que trasciende lo digital. Estas celebraciones no solo mantienen vivo el espíritu del vinilo, sino que también fomentan el turismo musical, atrayendo a visitantes que buscan conectarse con una parte importante del patrimonio cultural.
El Día Internacional del Disco de Vinilo es, en definitiva, una ocasión para celebrar no solo un formato, sino también el impacto duradero que ha tenido en la música y en las experiencias turísticas de quienes aún encuentran en él una conexión con el pasado.