El 18 de abril, la Comisión de Juristas de Cusco aguardaba el informe técnico crucial de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) para decidir el destino del Hotel Sheraton y las ruinas incas destruidas por su construcción. Sin embargo, la entrega no se realizó como esperaban.
La abogada Tika Luizar informó que la DDC no cumplió con la entrega, y el Ministerio de Cultura había apelado el plazo establecido. Guido Bayro, director de la DDC de Cusco, confirmó esto el 27 de abril, señalando que buscan aclaraciones sobre la sentencia del Tribunal Constitucional respecto a las responsabilidades en la demolición del hotel.
Según la comisión, esto evidencia obstrucción por parte del Ministerio de Cultura. Afirman que tanto el Ministerio, la DDC Cusco, la municipalidad y la constructora tienen responsabilidad, según el Tribunal Constitucional.
La Comisión y Heráclito José Cereceda Vergara solicitaron la intervención de Icomos, asesor de la Unesco, para garantizar la restitución de los bienes patrimoniales. Icomos advirtió que de no demolerse el hotel, Cusco podría ser considerado patrimonio en peligro y eventualmente retirado de la lista de la Unesco.
El Quinto Juzgado Civil de Cusco exigió un informe técnico a la DDC, pero su entrega es crucial para que la municipalidad pueda proceder con la demolición del hotel. La Comisión está presionando para que se cumpla la sentencia, incluso considerando una colecta internacional para financiar la demolición si se alega falta de presupuesto.
Los bienes afectados incluyen muros, andenes e inmuebles históricos, parte del patrimonio cultural de Cusco y con conexión directa a la civilización inca. Su destrucción durante la construcción del hotel ha generado una prolongada batalla legal.
El proceso judicial involucra a exfuncionarios de la Dirección de Cultura y la municipalidad, con denuncias por corrupción y crimen organizado. Hasta ahora, no se han aplicado sanciones definitivas.
El Juzgado Civil de Cusco ordenó la elaboración de un informe técnico sobre la demolición y restitución de los bienes culturales afectados, marcando un paso crucial en este largo conflicto.
Fuente: Infobae.