Search
Close this search box.

El Palacio de la Sal, una de las grandes experiencias turísticas que ofrece Bolivia al mundo

Compartir:

En el corazón del Salar de Uyuni, Bolivia, se encuentra el imponente “Palacio de la Sal”, un hotel construido en su totalidad con bloques de sal y el cual ofrece a sus huéspedes una experiencia inigualable a 3.600 metros sobre el nivel del mar.

Tres60.Travel conversó con Lucía Quesada, CEO del “Palacio de la Sal”, quien se refirió a las experiencias y desafíos que conlleva gestionar este hotel tan singular.

«La historia del palacio de sal se remonta hace más de 20 años atrás, cuando mi papá, que era un precursor del turismo y hotelería de la región, ve unos bloques como adobe y se le viene la loca idea de construir en sal, ya que había muchos turistas que le pedían pernoctar o hacer camping en el salar, y obviamente las temperaturas son muy bajas y no se podía brindar este servicio de camping, entonces decide construir en sal y comienza a hacer pruebas, y así construye el hotel», comentó.

Más que una experiencia…

Lucía Quesada, con gran entusiasmo relató los servicios que el hotel brinda a los turistas de todo el mundo: «Nosotros les ofrecemos varias experiencias, primero la de dormir en un hotel de sal, que es única. Después la gastronómica, donde tenemos comida típica de la región. Una gastronomía andino-fusión, que también demuestra la cultura de Bolivia donde hay muchas variedades, y lo que es el spa de autor, que ofrece terapia en base a sal, esas son las experiencias dentro del hotel».

«Ofrecemos con una empresa aliada, tours al salar de Uyuni, para visitar el salar, hacer el Full Day, ver el amanecer, las estrellas, la puesta de sol. La gente un día va a relajarse al hotel y posteriormente a conocer el destino«, indicó.

Recomendaciones para una estadía placentera:

La CEO del “Palacio de la Sal”, brindó una serie de recomendaciones para los turistas con respecto a la altura: “Estamos a 3.600 metros sobre el nivel del mar, entonces un huésped que vaya al hotel, tiene que tener en cuenta el hidratarse, comer poco, no hacer actividad física fuerte durante su estadía».

Con respecto al mantenimiento del hotel, Quesada comentó que es muy diferente al de los hoteles de ciudad: “Si se mancha una pared, no es volver pintarla solamente, sino picar esa parte, colocar sal, y también tener en cuenta que ese mineral, después de la temporada de lluvia, se le debe hacer un mantenimiento profundo, porque la sal absorbe esa humedad. Exteriormente el hotel tuvo que ser cubierto con fibra de vidrio para no sufrir cambios bruscos de temperatura», se refirió.

Un flujo turístico constante

Para finalizar, la CEO manifestó que el hotel mantiene turistas durante todo el año: «Si bien es temporada invernal para toda nuestra zona, es buena temporada porque recibimos muchos turistas europeos: franceses, alemanes, españoles e italianos, que ya tienen reservas hechas. En la temporada de verano, llegan muchos asiáticos, porque ellos buscan ver el salar con el espejismo. Tenemos dos segmentos del mercado que nos mantienen un flujo turístico constante en la región«.