Según muestra el informe ‘Understanding and Quantifying Mountain Tourism’ de la OMT, el turismo de montaña representa entre el 9% y el 16% de las llegadas de turistas internacionales en todo el mundo, lo que se traduce en entre 195 y 375 millones de turistas solo en 2019. Sin embargo, la escasez de datos nacionales relacionados con el turismo de montaña dificulta o incluso imposibilita la evaluación de las repercusiones económicas, sociales y medioambientales de este importante segmento.
Las montañas son el hogar de unos 1.100 millones de personas, algunas de las cuales se cuentan entre las más pobres y aisladas del mundo. Al mismo tiempo, las montañas atraen desde hace tiempo a turistas interesados en la naturaleza y los destinos al aire libre y en actividades al aire libre como el senderismo, la escalada y los deportes de invierno. También atraen a los visitantes con su rica biodiversidad y sus vibrantes culturas locales. Pese a esto, en 2019, el año más reciente del que se dispone de cifras, los 10 países más montañosos (en términos de altura media sobre el nivel del mar) recibieron solo el 8% de las llegadas de turistas internacionales de todo el mundo.
Gestionado de forma sostenible, el turismo de montaña tiene el potencial de aumentar los ingresos de las comunidades locales y ayudar a preservar sus recursos naturales y su cultura. Y, según diferentes Organizaciones, medir el volumen de visitantes a las montañas representa el primer paso vital para liberar el potencial del Sector.
«Con los datos adecuados, podemos controlar mejor la dispersión de los flujos de visitantes, apoyar una planificación adecuada, mejorar el conocimiento sobre las pautas de los visitantes, crear productos sostenibles acordes con las necesidades de los consumidores y elaborar políticas adecuadas que fomenten el desarrollo sostenible y garanticen que las actividades turísticas benefician a las comunidades locales», afirma el director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), QU Dongyu.
La generación de beneficios económicos, la creación de oportunidades para las comunidades locales y el desarrollo de productos sostenibles son las principales motivaciones para el desarrollo del turismo de montaña. El desarrollo sostenible del turismo de montaña también se identificó como un medio para ayudar a difundir los flujos turísticos, hacer frente a la estacionalidad y complementar la oferta turística existente.
A través del informe, la FAO y la OMT destacan la importancia de los esfuerzos colectivos, con la participación de las partes interesadas públicas y privadas de toda la cadena de valor, para mejorar la recopilación de datos, la normalización y la entrega para obtener una evaluación más completa del turismo de montaña en términos de volúmenes e impactos, para que pueda ser mejor entendido y desarrollado para alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
También se aboga por una labor concertada que ayude a concienciar sobre la importancia socioeconómica del turismo de montaña y por políticas específicas para crear empleo, apoyar a las pequeñas y medianas empresas y atraer inversiones verdes en infraestructuras y en la digitalización de los servicios turísticos.
Postura de las agencias
Desde CEAV, su vicepresidente 1º ejecutivo José Manuel Lastra afirma que «el turismo ligado a la naturaleza va mucho más allá del turismo rural y los países y regiones montañosas tienen una gran oportunidad a la hora de atraer visitantes interesados en realizar actividades relacionadas con las montañas, desde la práctica de deportes como el esquí hasta actividades ligados a las mismas, como el trekking y el senderismo. Para su mejor aprovechamiento y desarrollo es imprescindible la creación de productos específicos que tengan siempre la sostenibilidad como santo y seña, haciendo que los mismos sean compatibles con las comunidades que habitan estos entornos y por supuesto preservando en todo momento el patrimonio natural».
«Las empresas turísticas debemos huir de contribuir a escenas de masificación que se han visto en determinados lugares de la cordillera del Himalaya y ofrecer servicios y experiencias que mantengan la esencia natural de unos paisajes tan sumamente bellos. En el ámbito emisor, hablamos de un producto muy atractivo que tiene destinos icónicos en los cinco continentes. Y a nivel receptivo, la orografía española permite que el turismo de montaña sea un gran reclamo, permitiendo el desarrollo económico y social de comunidades vinculadas a sierras y montañas, en muchos casos municipios que pueden ver en el turismo la mejor manera para complementar la actividad agrícola y ganadera de cara a luchar contra el abandono y la despoblación rural», añade.
Fuente: visitantes.do