En el arranque de 2025, la industria del turismo LGBTQI+ sigue demostrando su relevancia, siendo uno de los segmentos más dinámicos y de mayor impacto económico. Alejandra Palma Trujillo, una destacada profesional del turismo en Chile, compartió con Tres60.Travel sus perspectivas sobre las expectativas y desafíos para este colectivo, resaltando el crecimiento de destinos inclusivos y el rol de las plataformas de turismo en la adaptación de sus servicios para ofrecer experiencias realmente inclusivas.
Según Alejandra, el 2025 traerá consigo nuevas oportunidades para la comunidad LGBTQI+, con destinos tradicionales como Brasil, Argentina y Chile, que continúan consolidándose como refugios inclusivos para turistas. En Chile, se destacan los atractivos naturales, culturales y gastronómicos, como las regiones vinícolas y las playas del país, donde se celebran grandes festivales y eventos que convocan a miles de turistas cada año.
La celebración de Año Nuevo es uno de los momentos más esperados, especialmente en la Quinta Región de Chile, que alberga el show de fuegos artificiales más grande del país. Durante esta festividad, los turistas, especialmente los de la comunidad LGBTQI+, se concentran en zonas costeras para disfrutar de espectáculos y momentos de integración. Alejandra destaca que las fiestas masivas y los shows, como los de drag queens, son clave para la celebración, consolidándose como una de las mayores expresiones culturales del colectivo.
El papel de las plataformas turísticas también está en evolución. Alejandra comentó que fue testigo de cómo los servicios turísticos en Sudamérica se adaptan a las necesidades de la comunidad LGBTQI+, con iniciativas gubernamentales que buscan capacitar a los prestadores de servicios en equidad de género y respeto hacia la diversidad. La creación de documentos y guías para alojamientos turísticos inclusivos es solo un ejemplo de cómo el sector está comprometido con la inclusión.
Un aspecto clave de la discusión es la importancia de la capacitación en los destinos turísticos. Alejandra participa activamente en la creación de material formativo que ayude a los prestadores de servicios turísticos a ofrecer una atención adecuada y respetuosa a las personas de la comunidad LGBTQI+. Esto refleja el compromiso de Chile y otros países sudamericanos en posicionarse como destinos no solo turísticos, sino inclusivos y respetuosos con la diversidad.
Sobre el futuro, Alejandra se muestra optimista con la posibilidad de que 2025 sea el año en que la industria del turismo, a nivel global, comience a implementar normas de inclusión laboral para la comunidad trans. A través de sus propias experiencias y colaboraciones con figuras públicas, Alejandra resalta la importancia de seguir avanzando en la inclusión laboral para personas trans, así como la necesidad de construir una cultura de respeto que impulse la igualdad en todos los sectores del turismo.
Finalmente, su reflexión sobre el año 2025 se centra en un llamado a la acción: que el turismo sea más inclusivo, que se reconozca la diversidad del colectivo LGBTQI+ y que se creen espacios de trabajo y consumo sostenibles para todos. En este sentido, Alejandra concluye: «La sustentabilidad no solo debe incluir el medio ambiente, sino también a las comunidades que históricamente fueron marginadas».