Tulio Pizarro analiza el impacto integral de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, desde la memoria histórica hasta el desarrollo económico y la accesibilidad.
La Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo) sigue consolidándose como uno de los eventos más importantes de la agenda cultural y educativa de Colombia. En diálogo con Tres60.Travel, el periodista, docente universitario y director de Passport Travel, Tulio Pizarro Aguilar, ofreció una mirada profunda sobre el significado de esta feria que, más allá de los libros, promueve el diálogo, la memoria, el turismo y la inclusión.
Un espacio para pensar y sanar a través de la lectura
Para Pizarro, la FILBo no es solo un evento literario, sino un espacio para reflexionar sobre la palabra como herramienta de transformación personal y social: “Es un espacio de diálogo para reflexionar acerca de la lectura, la escritura y la oralidad como herramientas fundamentales para el manejo emocional y la salud mental”, afirmó.
Desde su rol como comunicador y educador, Pizarro insistió en la necesidad de formar lectores capaces de contar historias que conecten con el alma: “Debemos brindar a nuestros estudiantes y oyentes la posibilidad de contar historias que merezcan ser leídas, que sanen el alma, el espíritu y alimenten el conocimiento”.
Un lanzamiento que conecta con la historia de Colombia
Uno de los momentos destacados de la feria fue el lanzamiento del libro conmemorativo por los 75 años de la Universidad de la Gran Colombia, evento al que asistió Pizarro junto al rector Marco Tulio Calderón Peñalosa.
La obra, escrita por Antonio José Rivadeneira Vargas, no solo celebra el aniversario institucional, sino que rescata episodios fundamentales de la historia colombiana y de la región: “Se aborda el papel de figuras históricas como Juan Nepomuceno Moreno, casanareño, militar y político, presidente interino de la Nueva Granada en 1818, así como de Francisco de Paula Santander, quien lo ascendió a coronel y comandante de lanceros”, explicó Pizarro.
El libro permite revivir episodios de la Guerra de Independencia y el contexto de la Gran Colombia, conformada por Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú, Bolivia y Panamá: “Es una obra apasionante para quienes amamos la lectura y la historia. Estoy considerando promover una edición digital para que llegue a más lectores”, adelantó.
Turismo y economía: un motor cultural en marcha
Más allá de su dimensión cultural, FILBo representa también un impulso importante para el turismo y la economía de la capital colombiana: “Estamos en Corferias desde las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche. Es impresionante la cantidad de visitantes. La feria ha superado expectativas y ha impactado positivamente sectores como la hotelería, la gastronomía y el comercio”, afirmó.
Pizarro relató cómo turistas y expositores aprovechan su estadía para recorrer lugares emblemáticos de Bogotá como La Candelaria, Monserrate o la Catedral de Sal de Zipaquirá: “Este tipo de eventos no solo fomentan el hábito lector, sino que dinamizan la ciudad entera. Es turismo cultural en su máxima expresión”.
Una feria accesible para todos los públicos
Uno de los avances más notables de esta edición 2025 ha sido su fuerte compromiso con la inclusión. La feria ofrece lengua de señas colombiana, audiodescripciones, textos en braille y otras herramientas para personas con discapacidad: “Las personas en estas condiciones muchas veces se comunican con el lenguaje del cuerpo. En Colombia hemos avanzado en la incorporación del lenguaje de señas en noticieros y eventos públicos”, explicó Pizarro.
También destacó el valor del braille como medio de lectura táctil que permite a personas con discapacidad visual tener acceso a los libros, y mencionó la diversidad lingüística con la que la feria ha sabido responder a su carácter internacional, incluyendo contenidos en inglés, francés, italiano y portugués.
FILBo: un encuentro de culturas y saberes
Con la presencia de España como país invitado y la participación de expositores de múltiples países, la FILBo se ha convertido en un punto de encuentro para el intercambio cultural entre naciones hermanas: “Cada país tiene su propia antropología, pero somos hermanos. Solo nos separan fronteras imaginarias. Desde Argentina hasta México y República Dominicana, compartimos saberes a través de la palabra”, reflexionó.
Como anécdota, compartió que en esta edición fue invitado a la presentación del autor argentino Carlos Martínez, quien lanzó su libro de historias de vida, reafirmando los lazos entre literatura y turismo cultural entre países.
Un cierre con compromiso emocional y educativo
Para cerrar, Tulio Pizarro expresó su agradecimiento por la oportunidad de compartir su visión en Tres60.Travel, y anticipó que próximamente ofrecerá un balance completo del evento: “Yo sé que además de la amistad existe un aprecio profundo. Desde mi rol como periodista, docente y lector, seguiré apostándole a una comunicación que eduque, que emocione y que construya comunidad”.
Con más de una semana por delante, la FILBo 2025 continúa posicionándose como una experiencia transformadora que trasciende los libros y conecta con la historia, el turismo, la inclusión y el alma colectiva de América Latina.