Gran Canaria cierra 2025 con récord histórico de conectividad aérea y proyección a 2026 y 2027

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Turismo de Gran Canaria cerró 2025 con un balance altamente positivo en materia de conectividad aérea, uno de los pilares estratégicos para la competitividad del destino. A lo largo del año, el trabajo coordinado entre aerolíneas, aeropuertos, instituciones y el canal profesional permitió consolidar rutas existentes, activar nuevas conexiones y proyectar futuras incorporaciones.

“Gran Canaria nunca ha estado más y mejor conectada que en la actualidad”, afirmó el consejero de Turismo, Carlos Álamo, destacando que esta red permite sostener el crecimiento en múltiples mercados, mejorar la estabilidad del destino y ampliar el margen de desarrollo tanto en verano como en invierno.

El destino cuenta ya con su mapa interactivo de vuelos actualizado para el invierno 2025/2026, una herramienta de referencia para el sector que refleja la amplitud de su red aérea. Este crecimiento se apoya además en cifras récord del Aeropuerto de Gran Canaria, que entre enero y octubre de 2025 registró 12,96 millones de pasajeros, un 5% más que en el mismo periodo de 2024, con conexiones a 160 aeropuertos de 30 países y la operación de 60 aerolíneas.

Nuevas rutas y proyección futura

La planificación para los próximos meses confirma nuevas aperturas con Francia, con Lille como próxima incorporación de Volotea, y refuerzos de cara a 2026 y 2027. Para el verano de 2026, Norwegian sumará Billund (Dinamarca), reabrirá Bergen e incorporará Stavanger, fortaleciendo el mercado escandinavo, mientras que Jet2 añadirá Londres Gatwick.

De cara al invierno 2026/2027, Volotea reabrirá la ruta Toulouse–Gran Canaria, recuperando una conexión estratégica con Francia. En el corto plazo, ya se activaron rutas como Wroclaw con Wizz Air, Sevilla con Binter y Burdeos con Transavia France, además de nuevas operativas de easyJet y airBaltic.

Este conjunto de incorporaciones responde a una estrategia basada en análisis de datos, planificación y colaboración constante, que permite no solo facilitar la llegada de visitantes, sino también diversificar mercados, avanzar en la desestacionalización y fortalecer el valor del destino a nivel global.