Grecia implementó oficialmente las nuevas tarifas de la Tarifa de Resiliencia Climática, un cargo diario que reemplaza el anterior impuesto por estancia, vigente desde 2018. Esta medida tiene como objetivo financiar un fondo de emergencia destinado a la preparación y respuesta ante desastres naturales, en un esfuerzo por mitigar los efectos del cambio climático en el país.
La tarifa se aplica a todos los huéspedes de hoteles, alquileres a corto plazo, villas y alojamientos turísticos, excluyendo los edificios de patrimonio arquitectónico, albergues juveniles y campings. La tasa varía según la categoría del alojamiento y la temporada, con tarifas más altas durante los meses de abril a octubre, considerados temporada alta.
Tarifas por noche (abril a octubre)
Hoteles: 1-2 estrellas: 2 euros. 3 estrellas: 5 euros. 4 estrellas: 10 euros. 5 estrellas: 15 euros
Habitaciones amuebladas en alquiler: Departamentos: 2 euros
Alquileres a corto plazo: General: 8 euros. Casas unifamiliares de más de 80 m²: 15 euros
Alojamiento independiente: Villas turísticas amuebladas: 15 euros.
Casas de vacaciones: Menos de 80 m2: 8 euros. 80 m² o más: 15 euros
Tarifas por noche (noviembre a marzo)
Hoteles: 1-2 estrellas: 0,50 euros. 3 estrellas: 1,50 euros. 4 estrellas: 3 euros. 5 estrellas: 4 euros
Habitaciones amuebladas en alquiler: Departamentos: 0,50 euros
Alquileres a corto plazo: General: 2 euros. Casas unifamiliares de más de 80 m²: 4 euros
Alojamiento independiente: Villas turísticas amuebladas: 4 euros
Casas de vacaciones: Menos de 80 m²: 2 euros. 80 m² o más: 4 euros
Aplicación de la tarifa
La Tarifa de Resiliencia Climática se cobra al huésped al momento de su salida. Los propietarios de alojamientos, ya sean empresas o particulares, deben emitir un recibo especial que documente el pago de la tarifa. Posteriormente, los ingresos generados se reportan mensualmente a la administración fiscal griega.
Impacto en el turismo
Esta medida generó opiniones mixtas dentro del sector turístico griego. Mientras que algunos valoran el compromiso del país con la sostenibilidad y la preparación ante desastres naturales, otros temen que el incremento de los costos pueda disuadir a ciertos viajeros, especialmente en categorías de alojamiento más económicas.
