Japón anunció que rompió el veto, desde este mes a cuatro países. Es decir que permitirá la entrada limitada de turistas procedentes de ellos, para probar sus medidas de prevención de contagios de covid-19, un paso más en la flexibilización de sus controles fronterizos, aunque los viajes serán organizados y controlados por las autoridades en determinadas zonas.
Durante la temporada de verano podrán visitar el país solo grupos reducidos de viajeros procedentes de Estados Unidos, Australia, Tailandia y Singapur, lo harán siempre en viajes organizados y bajo la estricta vigilancia de las autoridades niponas, indicaron desde el Ministerio de Territorio, Infraestructura, Transporte y Turismo.
También fueron muy estrictos al considerar que solo se permitirá la entrada de viajeros vacunados con las tres dosis y visitarán zonas delimitadas por las autoridades locales y donde no se estén registrando un número elevado de contagios, ha concretado el ministro nipón del ramo, Tetsuo Saito, en una rueda de prensa.
La medida forma parte de un proyecto piloto que permitirá «analizar la seguridad» en las zonas visitadas por los viajeros extranjeros, los posibles contagios que se registren entre ellos y el cumplimiento de las medidas y recomendaciones anti contagios vigentes en Japón, informa Efe.
Japón mantiene sus fronteras cerradas a visitantes de todo el mundo desde el inicio de la pandemia en 2020, y hasta hace unos meses también prohibía la entrada de personas con nuevos visados de estudios, de trabajo y viajes de negocios como parte de su estrategia para evitar la propagación del coronavirus y de la variante ómicron.
Visados
El pasado marzo, el Gobierno que lidera Fumio Kishida anunció que comenzaría a flexibilizar sus medidas de prevención de contagios ante el descenso de las infecciones tanto en Japón como a nivel global, lo que incluía permitir el acceso de personas con visados de corta y media duración, aunque mantuvo el veto turístico.
Las autoridades niponas esperan que la reapertura parcial y experimental de sus fronteras les permita evaluar la eficacia de sus medidas sanitarias y elaborar nuevas recomendaciones para permitir un futuro regreso de los turistas de todo el mundo. El citado ministro nipón destacó la «extrema importancia» del turismo internacional para la economía japonesa «y para la revitalización de las economías regionales».
Japón permite actualmente la entrada en su territorio de 10.000 viajeros por día, entre las que se incluyen ciudadanos nipones y residentes extranjeros y nuevos residentes con los antes citados visados o visitantes de negocio, un tope establecido para organizar las capacidades de test y revisión de los trámites burocráticos obligatorios para todas las personas que ingresen en el país, se ampliará a 20.000 en junio.
El primer ministro nipón anunció en marzo que desde el mes que viene Japón tiene previsto «flexibilizar sus procedimientos de entrada» para equipararlos a otros países del G7.
El archipiélago nipón, que nunca ha aplicado el confinamiento obligatorio durante la pandemia ni ha realizado test de covid a gran escala, acumula unos 8,4 millones de contagios de coronavirus y 30.000 fallecimientos, lo que supone la menor tasa de mortalidad del grupo de los siete.
Fuente:expansion.com/