El sector del turismo y el comercio minorista de Corea del Sur enfrenta dificultades tras la declaración de ley marcial del presidente Yoon Suk Yeol el 3 de diciembre. La medida generó preocupación en los mercados internacionales, y países como Estados Unidos, Reino Unido, Japón y Australia emitieron avisos de viaje recomendando evitar zonas concurridas.
Impacto en el turismo
La agitación política llamó más atención globalmente que otras situaciones similares, como las protestas durante el impeachment de la ex presidenta Park Geun-hye en 2016.
Aunque los minoristas que atienden a turistas internacionales no reportan un impacto inmediato en las ventas, se mantienen atentos a posibles caídas. Sin embargo, los hoteles de Seúl ya registró cancelaciones y un aumento de solicitudes de alojamiento alternativo, especialmente porque diciembre es una temporada alta para eventos corporativos y festivos.
Afectación a empresas clave
Las principales empresas del sector, como Korean Air y Hana Tour, vieron una caída de más del 5% en el valor de sus acciones en los últimos días. Además, la moneda surcoreana, el won, mostró volatilidad, superando los 1.440 por dólar después del anuncio de la ley marcial, su nivel más alto desde la crisis financiera global de 2009, antes de estabilizarse en 1.410 el 6 de diciembre.
Desafíos previos al conflicto
Estos eventos ocurren en un contexto ya complicado para Corea del Sur, donde el turismo y el comercio minorista enfrentan un crecimiento más lento en los visitantes provenientes de mercados clave como China, además de los efectos de los tipos de cambio desfavorables. La situación sigue en evolución, y las autoridades y las empresas continúan vigilando de cerca su impacto.