Los barrios más italianos de la ciudad paulista son el Brás, la Mooca, el Belém y el Bixiga, pero la influencia de los inmigrantes se siente en todo el estado de São Paulo.
En la sede de CAU/SP, ubicada en la Rua Quinze de Novembro 194, hay una exposición dedicada a celebrar el legado de la arquitectura italiana en el estado de São Paulo. Esta se exhibirá en el vestíbulo del edificio hasta el 2 de agosto de 2024, con la curaduría de Maria Rita Amoroso, Beatriz Piccolotto Bueno y Ana Carolina Gleria Lima.
Los italianos desempeñaron un papel fundamental en la construcción y ornamentación de São Paulo, dejando un legado arquitectónico y artístico que marca la ciudad hasta hoy. Desde la edificación del majestuoso Teatro Municipal, iniciada en 1903 por los arquitectos Ramos de Azevedo y los italianos Cláudio Rossi y Domiziano Rossi, hasta la concepción del emblemático Obelisco Mausoleo, diseñado por el escultor ítalo-brasileño Galileo Ugo Emendabili y ejecutado por el ingeniero alemán Ulrich Edler, la presencia italiana se siente en los principales hitos de la metrópoli paulistana. La Parroquia Nuestra Señora Achiropita, fundada por inmigrantes italianos, y el imponente Museo Paulista de la Universidad de São Paulo, construido por el ingeniero italiano Tommaso Gaudenzio Bezzi, el Monumento a la Independencia, esculpido por Ettore Ximenes y diseñado por el arquitecto Manfredo Manfredi, ambos italianos.
Se destaca también el popular MASP – Museo de Arte de São Paulo, proyectado por la italiana Lina Bo Bardi, y el Marco de la Paz en el Pateo do Collegio, que le valió a Gaetano Brancati Luigi una nominación al Nobel de la Paz en 2015. El monumento, que hoy existe en 28 lugares, se puede encontrar en Xiaolin, en la provincia de Nanjing, en China, así como en Uruguay, México, Argentina y Portugal. En Italia, hay un Marco de la Paz en Orsomarso, ciudad natal de Luigi, y otro en Asís. Estas son pruebas contundentes del legado de los italianos en São Paulo.
El escultor Victor Brecheret
Sus icónicas obras diseminadas por la ciudad han dejado su legado en diversas piezas emblemáticas, como el Monumento a las Banderas en el Parque Ibirapuera; el Fauno en el Parque Siqueira Campos; Después del Baño en el Largo do Arouche; Duque de Caxias em la Plaza Princesa Isabel; Diana Cazadora en el Teatro Municipal de São Paulo y la escultura de Juana de Arco en el Teatro María Della Costa, entre otras. Sus contribuciones también están presentes en monumentos como el Via Crucis y Cristo en la Capilla del Hospital de Clínicas, y en bustos como el de Alcântara Machado en la Academia Paulista de Letras y el de Brasílio Machado en la Facultad de Derecho de la USP. Además, algunas de sus esculturas se pueden encontrar en cementerios de la ciudad de São Paulo.
El Brás más allá de Italia
Situado en el corazón de São Paulo, el Brás es un barrio que encapsula la rica diversidad cultural y el desarrollo económico de la ciudad. Originalmente una región de chacras, el Brás se transformó en un barrio obrero y se convirtió en el «hogar» de los inmigrantes italianos. Con el tiempo, acogió a migrantes del noreste y enfrentó períodos de decadencia urbana. Hoy, el Brás es uno de los principales centros de comercio popular de la capital paulista, atrayendo diariamente a miles de visitantes de todo Brasil.
La historia del Brás está estrechamente ligada al portugués José Brás, propietario de una chacra en la zona. Construyó la iglesia del Señor Bom Jesus de Matosinhos, alrededor de la cual surgió un poblado que dio origen al barrio. El área, conocida como la parada del Brás, era un punto de parada para los viajeros entre la freguesia de Sé y la freguesia de Nuestra Señora de la Penha. El 8 de junio de 1818, el Brás fue elevado a la categoría de freguesia, con la iglesia de José Brás convirtiéndose en su matriz. En ese entonces, el barrio estaba poco poblado y sufría frecuentes inundaciones del río Tamanduateí.
El desarrollo del Brás se aceleró en la segunda mitad del siglo XIX, impulsado por la cultura del café, que promovió la urbanización e industrialización de São Paulo. La llegada de la São Paulo Railway en 1867 y la inauguración de la estación del Brás fueron hitos decisivos, facilitando el crecimiento industrial y comercial de la región. Carlos Augusto Bresser, pionero de la industrialización paulista, es considerado oficialmente el fundador del barrio.
La inmigración desempeñó un papel crucial en la formación del Brás. Inmigrantes, especialmente italianos, que llegaban al puerto de Santos eran transportados en tren a São Paulo y luego a las plantaciones de café en el interior. En 1887, se construyó el Hospedaje de Inmigrantes en el Brás para acoger a estos nuevos residentes, lo que intensificó el crecimiento del barrio.
Turismo de Compras
Hoy, el Brás es sinónimo de comercio popular y confección de ropa, destacándose por la diversidad de inmigrantes que componen su población. São Paulo es la capital brasileña con el mayor número de turistas de compras del país, desde el comercio popular hasta el lujo.
Además de los italianos, el barrio alberga inmigrantes de China, India, Argentina, Colombia, Perú, Grecia, Ecuador, Angola, Siria, Bolivia, Paraguay y Armenia. Esta rica diversidad cultural se refleja en la oferta de productos «hechos en Brasil», confeccionados por manos de todo el mundo, haciendo del Brás el destino ideal para compras de ropa y accesorios.
Actividades culturales en el Brás
El Brás también fue inmortalizado en la canción «Samba do Arnesto» de Adoniran Barbosa, simbolizando su importancia cultural e histórica.
Uno de los museos más interesantes de la ciudad se encuentra en el Brás: el Museo Catavento, que es interactivo y aborda temas de ciencia. La colección incluye más de 250 instalaciones, de las cuales 187 pertenecen a la Fundación Museo de Tecnología de São Paulo. Las exposiciones se dividen en cuatro secciones: Universo, Vida, Ingenio y Sociedad.
Inaugurado en 2009, el edificio que alberga el museo comenzó a ser diseñado por el arquitecto genovés Domiziano Rossi en 1911 y se completó en 1924, inicialmente sirviendo como el Palacio de las Industrias.
La Mooca y la historia de la inmigración
Fundado el 17 de agosto de 1556, el barrio de la Mooca, en São Paulo, tiene sus raíces en el período colonial brasileño, cuando las tierras eran habitadas por indígenas cerca del río Tamanduateí. El nombre «Mooca» posiblemente deriva del término indígena «Moo-oca», que significa «¡Ellos están haciendo casas!», o del tupí antiguo «mũoka», que significa «casa de pariente».
Durante la Revuelta Paulista de 1924, la Mooca fue objeto de bombardeos del gobierno federal, afectando significativamente el barrio obrero. La Mooca se destaca por la fuerte presencia de inmigrantes italianos, que moldearon la identidad local, influenciando desde la arquitectura hasta la gastronomía. Rodolfo Crespi, fundador del Cotonificio Crespi en 1896, es un nombre destacado en la historia del barrio debido a su industria textil.
Atractivos turísticos en la Mooca
La tradición italiana también está presente en el Clube Atlético Juventus, fundado en 1924 por empleados del Cotonificio. El club fue nombrado en honor al equipo italiano Juventus, con su color granate adoptado posteriormente.
Otro punto importante de la Mooca es el Museo de la Inmigración del Estado de São Paulo, cuya construcción comenzó en 1886. Originalmente un centro de recepción de inmigrantes, se convirtió en un museo contemporáneo dedicado a la historia de la inmigración europea y japonesa en Brasil. El museo es hermoso y sorprende por el buen gusto de sus instalaciones.
Otros atractivos turísticos del barrio son los bares en la Rua Guaimbé y los numerosos restaurantes y mercados italianos, algunos con más de cien años. Para los amantes de las artes escénicas, el barrio cuenta con el Teatro Arthur Azevedo; para los entusiastas de la música, el Casarão do Vinil. Nos Trilhos es un espacio dedicado a la restauración de trenes históricos del siglo XX, cuyos proyectos son financiados por los ingresos generados por actividades artísticas y culturales realizadas en el lugar. Entre las atracciones, se destaca una locomotora de vapor de 1922 en funcionamiento, además de varios vagones expuestos en el patio. El espacio también promueve muchos shows y eventos al aire libre. Para los lectores, la Biblioteca Affonso Taunay ofrece una colección de más de 20 mil títulos; para los aficionados a la patinaje, la pista estilo disco Roller Jam.
Belém/Belenzinho
Ubicado en la zona este de São Paulo, el barrio de Belém, cariñosamente apodado Belenzinho, remite a la tranquilidad de una ciudad del interior. Bañado por el río Tietê, el mayor río de São Paulo, que actualmente está en proceso de despolución.
A finales del siglo XIX, Belém, junto con los barrios vecinos del Brás y la Mooca, fue marcado por el inicio de la industrialización paulista. La región, que anteriormente albergaba haciendas y chacras, se convirtió en un polo industrial con la instalación de fábricas de tejidos y vidrio. Este desarrollo industrial marcó la transición del área rural a un centro urbano.
Uno de los hitos históricos más importantes de Belém es la Vila Maria Zélia, la primera villa obrera de Brasil. Ideada por el industrial Jorge Luis Street, la villa fue construida para ofrecer vivienda digna a los trabajadores de su industria, simbolizando una innovación en las condiciones de vida de los obreros de la época.
En 1911, el napolitano Conde Matarazzo inauguró la Textil y Estampados del Belenzinho. Posteriormente, en 1931, adquirió la Textil Santa Celina, también ubicada en el barrio, y en 1936, estableció la Fábrica de Papel y Cartón en Belenzinho.
Cultura y Ocio
La tradición católica de los residentes de Belém se refleja en la Parroquia de São José do Belém, creada en 1897, desmembrada de la parroquia del Bom Jesus do Brás. En 1899, se creó el distrito de paz de Belenzinho, también desmembrado del Brás, consolidando la identidad del barrio.
Belém ofrece diversas opciones de ocio y cultura. El Sesc Belenzinho, uno de los mayores centros de cultura, deporte y ocio de la ciudad, posee una superficie total de 35 mil metros cuadrados. La unidad es referencia en actividades culturales y deportivas, atrayendo visitantes de todas partes de São Paulo y cuenta con un teatro de excelente reputación. Otro destaque es el Parque Estatal de Belém Manoel Pitta, que ofrece una amplia área verde con comodidades como área de skate, columpios, toboganes, canchas deportivas, mesas para picnic, parques infantiles y senderos para niños. El parque es un lugar ideal para familias, aunque es necesario tener cuidado con los perros sueltos y sin correa. En el parque se encuentra la Fábrica de Cultura Parque Belém, inaugurada en 2012, un importante centro cultural del barrio. Con 5.500 metros cuadrados, la Fábrica cuenta con un teatro de 277 asientos, salas de aula, biblioteca y estudio de sonido, ofreciendo una variedad de actividades culturales y educativas para la comunidad.
El Bixiga, cultura y gastronomía
Históricamente formado por inmigrantes italianos, el barrio del Bixiga en São Paulo se destacó por su importancia histórica y turística, manteniendo vivas las tradiciones y religiosidad italianas, así como sus famosas cantinas, como Basilicata – Pan, Emporio y Restaurante, que celebró 110 años en abril. Aunque muchos italianos y sus descendientes ya no residen en la zona, Bixiga sigue siendo reconocido como un refugio de la comunidad italiana. Además, el barrio alberga la sede de la escuela de samba Vai-Vai, que hasta hoy realiza ensayos por las calles locales.
La ocupación de la región comenzó en 1559, como Sítio do Capão, evolucionando a Chácara das Jabuticabeiras debido a la abundancia de estos árboles. En la década de 1820, las tierras fueron compradas por Antônio Bexiga, cuyo apodo dio nombre al barrio. En 1870, la zona comenzó a ser loteada, atrayendo inmigrantes italianos que no querían trabajar en las haciendas de café. Aunque no se convirtió en un barrio industrial, Bixiga se destacó en el sector de servicios y ganó fama por su bohemia, gastronomía, emporios, teatros y figuras icónicas como el cantante y compositor Adoniran Barbosa, considerado uno de los genios musicales de Brasil. Referencia en gastronomía de inmigrantes italianos, el barrio ofrece pasta para todos los gustos, anticuarios y vida cultural con samba, con la escuela Vai-Vai y ruedas de samba y jazz en la Escalera de Bixiga. Con el tiempo, la población italiana fue disminuyendo, especialmente a partir de los años 1960, con grandes obras públicas y la llegada de migrantes del noreste.
Las fiestas italianas en las parroquias
El Vaticano, ubicado en Europa, prácticamente dentro de la ciudad de Roma, es considerado el país más pequeño del mundo en extensión territorial.
Las fiestas italianas en São Paulo, promovidas por las parroquias, son eventos tradicionales que reflejan la fuerte presencia de la comunidad italiana en la ciudad. La inmigración italiana a São Paulo ocurrió entre 1870 y 1945, y hoy se estima que el 80% de la población italiana es católica. Estas fiestas se celebran anualmente, destacándose por su autenticidad y participación comunitaria. Aquí están los detalles de las fiestas programadas para 2024:
Fiesta de Nuestra Señora de Casaluce
Fecha: del 27 de abril al 26 de mayo.
Horarios: sábados: 18:00 a 24:00 y domingos: 18:00 a 23:00.
Lugar: Rua Caetano Pinto, 618 – Brás.
Detalles: En su 124ª edición, es la fiesta italiana más antigua de la ciudad, con más de 30 puestos y espectáculos musicales.
Fiesta de San Vito
Fecha: del 1 de junio al 14 de julio.
Horarios: sábados y domingos a partir de las 19:00.
Lugar: Rua Fernandes Silva, 96 – Brás.
Detalles: En la 106ª edición, la fiesta es organizada por la Asociación Beneficente San Vito Mártir, con recaudación destinada a acciones sociales.
Fiesta de Nuestra Señora Achiropita
Fecha: del 3 de agosto al 1 de septiembre.
Horarios: sábados: 18:00 a 24:00 y domingos: 17:30 a 22:30.
Lugar: Rua Dr. Luís Barreto, Rua São Vicente y Rua 13 de Maio – Bixiga.
Detalles: En la 98ª edición, es una de las fiestas italianas más famosas de São Paulo, organizada por la Parroquia de Nuestra Señora Achiropita, con atracciones gastronómicas, musicales y culturales.
Fiesta de San Gennaro
Fecha: del 7 de septiembre al 6 de octubre.
Lugar: Rua Lins y Rua San Gennaro, 950 – Mooca.
Detalles: En su 51ª edición, la fiesta se lleva a cabo en el barrio de Mooca, conocido por su gastronomía italiana y lazos comunitarios.
Estas fiestas no solo celebran la fe católica, sino que también son momentos de confraternización y preservación de la cultura italiana en São Paulo.
Reportaje de La trilogía paulistana: Mary de Aquino,Periodista brasileña, especializada en turismo; escribe para Travel2Latam; la revista La Voz Turística y la revista Marco Zero, de Brasil y fundadora y directora ejecutiva de Future Business Travel.
Fotografías: -Mary de Aquino (Centro de São Paulo; Escultura Despues del Baño; Barrio de Belém; Museo de la Inmigración; Barrio de Bixiga).
-Geovana Fraga (Línea Roja del Metro; Piscina Sesc Belenzhinho; Roller Jam)
-Rafael Salvador (Colección de Theatro Municipal)
–André Stefano ( Colección SPCVB; Bras, Mercado Municipal y Parque Dom Pedro)
