El turismo invernal en Austria y Suiza enfrenta una temporada desafiante. Con apenas 9 millones de habitantes, Austria depende en gran medida de los turistas extranjeros para llenar sus estaciones de esquí y alcanzar la meta de 60 millones de días de esquí por temporada. Los alemanes, principales clientes de los complejos invernales austriacos, comenzaron a reducir tanto la frecuencia como el gasto en sus viajes, una tendencia que preocupa a la industria.
Alemania en recesión: el impacto en el turismo
Aunque los salarios en Alemania aumentaron más que la inflación en 2024, la incertidumbre económica prevalece. El país atraviesa su segundo año consecutivo de caída en el Producto Interno Bruto (PIB), con grandes empresas como Volkswagen, ThyssenKrupp y Bayer anunciando despidos masivos. Este clima de inestabilidad afecta directamente el comportamiento de los consumidores. Según un estudio de la asociación Forschungsgemeinschaft Urlaub und Reisen (FUR), este invierno, muchos alemanes limitarán sus vacaciones a una sola salida, cuando antes era habitual que hagan dos o tres viajes al año.
A esto se suma la inflación, que amenaza con superar las previsiones iniciales y podría erosionar aún más el poder adquisitivo, obligando a las familias a priorizar el ahorro.
Un cambio en las preferencias del turista alemán
Si bien los alemanes no dejaron de esquiar, están optando por destinos más económicos y reduciendo sus gastos durante las vacaciones. Esto supone un problema para Austria y Suiza, cuyas estaciones dependen en gran medida del gasto extranjero. A pesar de contar con infraestructuras de primer nivel, el encarecimiento de los servicios en estos países los ha hecho menos competitivos frente a destinos más asequibles.
Por otro lado, aunque podría pensarse que las estaciones de esquí alemanas se beneficiarían de esta situación, la realidad es más compleja. A excepción de algunos complejos como Garmisch-Partenkirchen, muchas estaciones locales no tienen la capacidad o modernidad para competir con destinos europeos de bajo costo que ofrecen mejores instalaciones.
Preocupación en el sector de teleféricos y hotelería
Las Asociaciones de Operadores de Teleféricos en Suiza y Austria ya anticipan una caída en el número de esquiadores para esta temporada. Las bajas reservas hoteleras y la tendencia de los turistas a cancelar o posponer sus planes de última hora complican aún más las perspectivas.
«Las reservas ya no son un indicador fiable. Muchos turistas cambian sus planes en el último momento, lo que genera incertidumbre tanto para los hoteles como para las estaciones», afirmó un portavoz de la Asociación Austriaca de Operadores de Teleféricos.
Para contrarrestar esta situación, los operadores turísticos y las estaciones de esquí en Austria y Suiza están buscando estrategias para atraer a un público más diverso. Promociones especiales, paquetes familiares y ofertas de última hora son algunas de las medidas implementadas para captar a los esquiadores que buscan ahorrar sin renunciar a sus vacaciones.
Sin embargo, el desafío sigue siendo grande. Con una economía alemana que lucha por recuperarse y la incertidumbre económica global, las estaciones de esquí deben prepararse para una temporada de bajas cifras, mientras intentan mantener su reputación como destinos invernales de élite en Europa.