En la noche del 25 de septiembre, la embajadora de la República Checa en Brasil, Pavla Havrlíková, recibió invitados para conmemorar el Día Nacional de la República Checa.
En esta ocasión, el CEO de Redescobrindo destacó las iniciativas de promoción del turismo checo que ha venido desarrollando en colaboración con la embajada.
Este año, la relación entre el CEO de Redescobrindo, Marcos Oliveira, y la República Checa se fortaleció durante el 1º Piracaia Tchéquia Week, un festival gastronómico que incluyó una serie de conferencias y actividades paralelas, entre ellas, dibujos realizados por niños en celebración de la cultura y las tradiciones checas.
El empresario checo Jan Antonín Bata asumió la dirección de la fábrica Bata en 1932, sucediendo a su medio hermano y fundador, Tomáš Bata. Con el apoyo del entonces presidente Getúlio Vargas y sus políticas de industrialización en Brasil, la industria de calzado Bata, originaria de Checoslovaquia, planeó la construcción de diez fábricas con villas obreras en todo el país, de las cuales cuatro fueron efectivamente establecidas. Una de estas villas, Batatuba, ubicada en Piracaia, llegó a emplear a unos dos mil trabajadores, incluidos refugiados de guerra y campesinos.
Tras la muerte de Jan Antonín Bata en 1965, la empresa continuó sus operaciones hasta 1983, cuando se vio obligada a declararse en quiebra. Reconocida por su inversión en investigación y formación de empleados, muchos de estos profesionales terminaron fundando sus propias fábricas de calzado. La tradición zapatera de la familia Bata se remonta a 1576 y, en 1938, la empresa Bata en Checoslovaquia contaba con 118 mil empleados y estaba presente en 89 países.
Reportaje y fotos: Mary de Aquino, periodista brasilera