Ryanair anunció un fuerte recorte de su capacidad en España para la temporada de invierno 2025, una decisión que impactará especialmente en aeropuertos regionales con una reducción del 41% y en Canarias con un 10%, lo que supone la pérdida de más de un millón de plazas aéreas.
Entre las medidas más drásticas se encuentra el cierre de su base en Santiago de Compostela, la suspensión de todos los vuelos a Vigo y Tenerife Norte, además del mantenimiento del cierre en Valladolid y Jerez. También habrá recortes significativos en Zaragoza (-45%), Santander (-38%), Asturias (-16%) y Vitoria (-2%), junto a la cancelación de 36 rutas directas.

La compañía justificó la decisión en las “tasas aeroportuarias excesivas y poco competitivas” impuestas por AENA, que prevé un incremento del 6,62% en 2026, el más elevado en más de una década. Eddie Wilson, CEO de Ryanair, advirtió que esta política tarifaria limita el crecimiento del turismo y desvía inversión, empleo y conectividad hacia destinos que sí ofrecen incentivos, como Italia, Marruecos o Croacia.
La aerolínea recordó que su actividad en España genera un aporte estimado de 28.000 millones de euros al PIB, más de 10.000 empleos directos y una inversión superior a los 10.000 millones, pero que estos beneficios se ven frenados por decisiones que “ponen en riesgo la competitividad del país en el mercado aéreo europeo”.