El Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira es un centro para la conservación, investigación y difusión de la Cueva de Altamira, en Santillana del Mar, España, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985.
Junto a la Cueva, el Museo ofrece al visitante talleres de tecnologías prehistóricas y la exposición permanente “Los tiempos de Altamira”, con objetos procedentes de dicho yacimiento, así como de los de “Él Morín”, “El Juyo” y “El Rascaño”. También forma parte de esta exposición la denominada neocueva, una réplica artificial de las cuevas originales, construida con objeto de preservar las mismas de los perjuicios derivados de una afluencia masiva de visitantes.
Para ahondar más sobre la importante historia de este museo y de las cosas sensacionales que puede ofrecer a sus visitantes, Tres60.Travel realizó una entrevista exclusiva con la directora del establecimiento, Pilar Fatás Monforte.
En primer término, la entrevistada explicó el trabajo minucioso que se lleva adelante en el lugar: “Al ser considerado patrimonio de la humanidad, la labor es más exigente. Nuestro museo se encarga de la gestión integrada de un bien patrimonial de primer orden y reconocido mundialmente que es la Cueva de Altamira. El deber principal es preservar al máximo y mantenerla vigente”, manifestó.
Hallazgo rupestre
La Cueva de Altamira, es una de las cuevas más importantes del Paleolítico a nivel mundial. Fue descubierta por Marcelino Sanz Sautuola, en 1879, durante una cacería que significó el descubrimiento del arte rupestre paleolítico. Su hallazgo suscitó una fuerte polémica entre los arqueólogos de la época por la autenticidad de las mismas, ya que no consideraban capaces a los hombres prehistóricos de realizar unas pinturas tan perfectas. Actualmente, se las considera como las cuevas más importantes y famosas.
Pilar, detalló la importante organización que se debe tener para realizar turismo en el Museo, según explicó, hay un límite para la cantidad de ingresantes y por lo tanto la lista de espera es grande. “Nosotros gestionamos a los tipos de visitantes, por un lado aquellos que quieren conocer la Cueva de Altamira, que su visita es restringida, solo 250 personas al año pueden ingresar. Por otro lado, está la parte de las reformas que se hicieron en el lugar, para ofrecer otro tipo de exposición y proyectar el interior de la cueva, esta es más concurrida y en 2023 recibimos la visita de 285.000 personas”, comentó.
Para finalizar, explicó que las piezas más importantes que se pueden encontrar dentro del yacimiento de la Cueva tienen una antigüedad de 35.000 años, mientras que las figuras más modernas tienen datos de haber sido descubiertas hace 12.000 años.