Entre Miramar y Mar del Sur, en un entorno natural privilegiado, abrió Vaiam, el primer parador de la costa argentina pensado especialmente para la comunidad judía ortodoxa. Este espacio, habilitado a través de la ordenanza municipal 381/24 del Concejo Deliberante de General Alvarado, busca ofrecer un ambiente acorde a las tradiciones y mandatos religiosos de esta comunidad, sin cerrar sus puertas a otros visitantes.
Un enclave único entre la naturaleza
Vaiam se encuentra en una bajada hacia la playa que combina la belleza de extensas arenas con un paisaje de médanos, vegetación y un arroyo que desemboca en el mar. Su acceso, un sendero arbolado a un kilómetro del Bosque Energético, conecta el Vivero Municipal Florentino Ameghino con Mar del Sur.
El responsable del proyecto, Matías Janises, quien ya había identificado las necesidades de esta colectividad en su complejo de cabañas en Miramar, señala: “La comunidad judía tiene un arraigo especial aquí, y vimos una oportunidad de crear un espacio donde puedan disfrutar de nuestras playas sin comprometer sus valores religiosos”.
Un espacio inclusivo y respetuoso
Aunque Vaiam está diseñado con las necesidades de la comunidad judía ortodoxa en mente, no es un espacio exclusivo. Por ello, se enfatiza la convivencia entre turistas de diversas creencias: “El pedido es guardar respeto hacia esta profesión de fe, ya que hay muchos kilómetros de playa para que todos puedan disfrutar”, explicó el intendente Sebastián Ianantuonny.
La vestimenta modesta, como vestidos largos y pañuelos en el cabello para las mujeres, forma parte de los valores de la comunidad. Si bien han surgido pequeñas tensiones por desconocimiento, el diálogo y la mediación han sido clave para fomentar un ambiente de respeto mutuo.
Servicios y desarrollo en curso
El parador, aún en etapa de desarrollo, ofrece estacionamiento, baños y un food truck con opciones kosher supervisadas por un rabino. Además, se espera que este fin de semana se habilite la conexión eléctrica para ampliar los servicios.
Diego, un guardavidas de la zona, destaca que desde hace años la comunidad busca esta franja de playa para evitar las aglomeraciones del centro de Miramar: “El lugar es tranquilo, ideal para quienes valoran un ambiente más sereno y respetuoso”, comentó.
Proyección y legado
Vaiam no solo responde a una necesidad específica, sino que también honra el legado de la comunidad judía en Miramar, cuyas primeras inversiones en la ciudad datan de los años 70. Según las expectativas, el parador verá un incremento de visitantes en febrero, el mes de mayor afluencia de esta colectividad.
Con este proyecto, General Alvarado se posiciona como un destino que celebra la diversidad y se adapta a las necesidades de quienes eligen sus playas, siempre manteniendo un espíritu de convivencia e inclusión.
