El jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos, recibió en Casa Rosada a representantes clave de la industria de cruceros, en una reunión convocada para analizar estrategias que permitan fortalecer este sector estratégico para el turismo receptivo argentino.
Participaron del encuentro Fernando Joselevich (Costa Crociere), Alejandro López y Javier Massignani (MSC Cruceros), y Juan Pablo Maglier, representante de CLIA (Cruise Lines International Association) en Argentina. Durante la reunión se abordaron los principales desafíos de la actividad, como la necesidad de establecer una cooperación público-privada que permita consolidar el crecimiento del sector y ampliar la llegada de cruceros a nuevos destinos del país.
En la temporada 2023-2024, Argentina recibió 140 recaladas, principalmente en Buenos Aires, Puerto Madryn y Ushuaia. Sin embargo, los altos costos operativos y tarifarios, especialmente en la Hidrovía Paraná-Paraguay, están afectando la competitividad regional de los puertos argentinos.
CLIA presentó un informe con propuestas concretas, entre ellas, la creación de una categoría tarifaria específica para cruceros internacionales, que implicaría costo fiscal nulo y alto impacto económico. La iniciativa busca aplicar un esquema de segmentación tarifaria fluvial exclusivo para cruceros de pasajeros en temporada alta.
Además, se propuso incluir a la actividad de cruceros en los criterios técnicos y económicos de la próxima licitación de la Hidrovía, y convocar una mesa de trabajo público-privada sobre turismo fluvial internacional.
“La industria de cruceros genera más de 5.000 empleos indirectos y representa una oportunidad concreta para el desarrollo federal, el ingreso de divisas y la dinamización de sectores como el hotelero, gastronómico y cultural”, destacaron desde CLIA. “Argentina puede posicionarse como un hub competitivo en Sudamérica si mejora sus condiciones logísticas y regulatorias”, concluyeron.
