La pandemia reinventó al mundo entero. Se modificaron costumbres, hábitos, nuevas formas de encarar la vida y los negocios. Reinventarse es una constante. Y el turismo, como ningún otro sector, debió desarrollar proyectos de valor como el glamping: una tendencia emergente que viene a combinar el glamour (lujo) con la naturaleza.
Son establecimientos con facilidades y comodidades de un hotel de buen nivel, pero en ámbitos aptos y con ambientaciones similares a los de la vida campestre. Su nombre es toda una revelación, debido a que combina el glamour en sus primeras cuatro letras con el camping en las cuatro finales: glamping. Todo esto, sin dejar de pensar en el aire libre, cierto espacio personal reservado y aislado, dos variables indispensables en épocas de pandemia.
Con el objetivo de brindarle al viajero una experiencia singular, nació esta idea original que combina lujo con aventura. Así aparecen en escena los hoteles burbuja. Un hotel burbuja es, de manera básica, una esfera o domo transparente de plástico en cuyo interior se pueden alojar una o más personas. El objetivo es que tengan una vista espectacular del sitio a su alrededor sin privarse de todas las comodidades. En pocas palabras, Ecoturismo con todos los lujos.
En referencia a los viajeros que quieren vivir una experiencia en medio de la naturaleza salvaje pero con las comodidades y lujos de un hotel cinco estrellas se presenta esta propuesta con domos geodésicos de rápida construcción que se adaptan a cualquier entorno. Ideal para viajeros que quieren mantenerse en burbuja.
Con mirada emprendedora
La demanda de esta propuesta generó una inyección en la economía de inversionistas que ponen el ojo en esta tendencia, gracias a proyectos como el de Bubble Hotels, fundado por Nathan Resnick en San Diego, ha recaudado más de 750.000 dólares y está en medio de una ronda de inversión para presentar su versión de glamping al mundo.
En EE.UU es un éxito: en New York, recibieron un 105 % más de reservas que en 2019. En California, el 145% y Texas fue del 185% en comparación con 2019 (Glamping hub)
Para David Troya, Fundador de Glamping Hub, una plataforma de reserva de alojamientos del turismo sostenible presente en una decena de países, “2020 fue difícil en muchos sentidos, pero para esta nueva modalidad se prevé un rotundo éxito. El glamping es lo que la gente necesitaba en un momento de disrupción, incertidumbre e imprevisibilidad”.
Contemplando las estrellas
Bajo estrellas, en medio del silencio, con domos, tiendas de campaña o motorhomes que permitan pernoctar sin impacto ambiental. Se trata de una modalidad que sólo tuvo que ajustarse a las regulaciones y restricciones cambiantes el año pasado.
Las propiedades de glamping están llenando el vacío de viajes, ya que a menudo son alojamientos de lujo aislados que se encuentran en el corazón de la naturaleza, lejos de las ciudades abarrotadas. Esta es una nueva forma de viajar que permite libertad, seguridad y aventura.
Las reservas de alojamientos muy apartados aumentaron un 91% en comparación con 2019, según datos de Glamping Hub. “Las búsquedas aumentaron un 67%, incluso fuera de temporada -explica Troya-. Sorprendentemente, en las zonas más afectadas de EE. UU., se detectaron grandes aumentos anuales. En New York, recibieron un 105 % más de reservas que en 2019. En California, el 145% y Texas fue del 185% en comparación con 2019”.
Las reservas de alojamientos acogedores aumentaron un 113% y los alojamientos tranquilos aumentaron un 196%. La duración media de la estancia aumentó en un 5% y el número medio de huéspedes por viaje aumentó de 2 a 3 personas.
Días elegidos
Para la mayoría de los glampers, el sábado es el día más popular para registrarse, pero muchas personas aprovecharon un día adicional durante el fin de semana. El viernes es ahora el segundo día más popular para registrarse, en comparación con el cuarto lugar en 2019. Se observaron un 144% más de registros los viernes en comparación con 2019.
Mi casa donde sea
El modelo de alojamiento clásico en este tipo de lugares es el domo: una suerte de carpa amplia, con camas confortables y otras comodidades. Además, como suelen ubicarse en paraísos naturales (bosques, zonas de playa, montañas), complementan la propuesta con actividades que aprovechan las características del lugar: deportes de aventura, kayak, escalamiento, pesca con mosca, trekking. En líneas generales, cuentan con guías locales especializados, también con un gran nivel de conciencia sobre el cuidado del lugar que habitan.
Glamping Patagonia Camp
En Argentina, país de geografía amplia y generosa en paisajes, el glamping tiene muchísimo espacio de desarrollo. Un ejemplo se ve en el Parque Nacional Los Alerces, un área protegida de la provincia de Chubut, donde El Aura Lodge instaló domos con los que logró establecer un diseño que se funde con el bosque virgen que lo circunda. Producen una sensación bellamente ambigua: la de estar en contacto directo con la naturaleza y, al mismo tiempo, inmersos en una absoluta intimidad. Los domos ofrecen comodidad y confort en contacto directo con la naturaleza, un espacio confortable, de bajo impacto para el medioambiente, que brinda una integración perfecta con el entorno. Se trata de una alternativa excepcional para disfrutar de un alojamiento distinto en el corazón del bosque virgen.
Su estructura
Los domos para cuatro personas de 25 m2 están equipados con cuatro camas individuales, piso de madera, ropa de cama y desayuno. Los que son para dos personas, de 16 m2 tienen una cama matrimonial. Están en un espacio de una hectárea sobre la costa de Lago Verde y están rodeados por bosque de arrayanes.
Suelen ubicarse en paraísos naturales como bosques, zonas de playa, montañas (El Aura Lodge)
Vecino de allí, Río Arrayanes Glamping incorpora elementos como mesas de luz con lámparas LED recargables. Nació con el objetivo de “crear o recrear los vínculos entre el hombre y la naturaleza en el respeto mutuo”, según declaran sus propios creadores, funciona de octubre a marzo y tiene un domo adicional que opera como comedor. No menos paradisíaco es Adventure Domes, ubicado cerca del Parque Nacional Los Glaciares y de su hito más famoso, el glaciar Perito Moreno.
A la hora de definir este modelo de hacer turismo, sus creadores sostienen: “Es una manera diferente de viajar: la mejor, sin dudas”.
Pionero en Chile, con la majestuosidad de Torres del Paine como escenario de fondo. Es un proyecto que se desarrolló desde el inicio siguiendo principios sustentables. Es por eso que la construcción y operación de Patagonia Camp se desarrollan de forma eco-amigable, siendo lo más respetuosos posible con el medio ambiente. Sus domos se llaman yurts y permiten estar en contacto íntimo con la naturaleza, sintiendo el sonido del viento o de la lluvia y ver las estrellas a través de la cúpula central desde la cama.
En Perú, el imperdible es Inkaterra Reserva Amazónica. Establecida en 1975, es pionera del ecoturismo y el desarrollo sostenible en Perú. Ha dedicado las últimas cuatro décadas a diseñar auténticas experiencias de viaje, con el objetivo de preservar la biodiversidad y las culturas locales. Un albergue de lujo ecológico frente al río Madre de Dios, Inkaterra Reserva Amazónica tiene 35 cabañas de madera inspiradas en la cultura Ese’Eja 540 especies de aves han sido registradas dentro de la propiedad, en el corazón del bosque lluvioso.
En Londres, El ZSL London Zoo Lodges está situado en un entorno extraordinario dentro del zoo de la ciudad,donde los huéspedes se acuestan para pasar la noche a tiro de los leones asiáticos. Ubicado en los alrededores de Regent’s Park,uno puede despertarse con los sonidos de los leones rugientes, gibones cantando, flamencos que hacen su coro y la fauna nativa vecina.
La “jaula” personal está inspirada en el encanto acogedor de los hoteles en la casa gujarati nativa de los leones en la India, las cabañas tienen un toque tradicional y cada una está inspirada en un animal diferente que se encuentra viviendo con los leones en el bosque de Gir.
Domo móvil (MacTrail)
Una forma ideal de crear el propio domo móvil llega de la mano de un emprendedor nacional con orígenes en la microarquitectura de la náutica, que desarrolló una mini casa rodante. MacTrail está dedicada al diseño y fabricación de trailers, food trucks, remolques y trailers para embarcaciones, entre otros, con. 15.000 unidades producidas en su fábrica San Fernando.
Su mini casa rodante -que ya se exporta-, está equipada con cama de 2 metros por 1,7 metros de ancho más una cucheta transformable en respaldo o asiento diurno, mesa, baño químico y lavamanos, kitchenette trasero, ventanas y aireador Dometic alemanes, lugares de guarda sistema de agua completo, audio/bluetooth, porta equipajes, escalera, auxilio, carrocería en fiberglass, aislación térmica, luces Led, todo en un remolque de categoría O2 patentable con toda la documentación correspondiente a su categoría. Una idea para llevarse el glamping donde se desee.
Esta es una tendencia que ya tiene propiedades en todos los rincones del mundo, una buena iniciativa viajera de pandemia. Un punto de partida para conocer las diferentes propuestas y hasta reservar un lugar es el sitio web glamping.com. El viajero se instala por la noche en su domo, carpa, lodge o minimotorhome, mira el cielo y comprende que en ningún hotel tendrá estrellas a su disposición.
Siguiendo con la línea del emprendedurismo los economistas destacan que los emprendimientos de glamping son propuestas que tienen una fórmula de negocios.
Sobre esto, Hernán Etiennot, profesor del IAE Business School, la escuela de negocios de la Universidad Austral, detalla que «es posible la reconversión a una oferta de mayor aislamiento. La fórmula de los negocios siempre ha sido precio por cantidad o, para ser más precisos, margen por rotación».
Agregando que: «si vamos a las estrategias de más largo plazo, el resultado obvio para dar mayor aislamiento es absorber los mismos costos fijos con menos clientes. La solución más intuitiva es la suba de precio y, para ello, deberán generar una propuesta de mayor valor«, añade Etiennot.
En el caso del glamping, la propuesta de valor está dada no solo por las comodidades del alojamiento en domos -algunos de los cuales tienen un acondicionamiento de lujo-, sino sobre todo el entorno ofrecido. Un paisaje soñado es el principal activo.
En Argentina operan hoy aproximadamente 35 glampings, de los cuales 10 comenzaron en periodo de pandemia, según informa Gustavo De Figueredo, quien opera en Capilla del Monte (Córdoba) Geo Glamping, uno de los primeros que hubo en el país, pero también es dueño de Glamping South, una página de búsqueda y reservas exclusivamente de glampings. De Figueredo es también uno de los impulsores de la cámara de glampings, iniciativa todavía en formación.
Con casi una década de experiencia en el rubro, el empresario afirma que, proporcionalmente, «es la modalidad de alojamiento que más creció». «El crecimiento no es solo de la oferta, sino también de la demanda. A través de la página vemos un aumento exponencial de turistas que buscan glampings«, destaca.
De Figueredo no atribuye el incremento solo a la pandemia, que exige distanciamiento para evitar contagios. Asegura que «ya la rueda venía rodando» y que lo que hoy se ve en Sudamérica en general ya se había registrado en años anteriores en países como el Reino Unido, Francia, España o Estados Unidos.
Las variantes de los domos hacen que la inversión en su construcción sea muy variable, en función de la sofisticación fundamentalmente del interior y de las características del terreno.
Con casi 11 años de existencia, la fabricante Domos Argentina ya ha realizado unos mil domos en el país, entre los destinados para venta y los orientados al alquiler. Ofrece 18 modelos -cuya extensión va desde los 11 m2, hasta los 300 m2-, de los cuales 16 son en acero galvanizado y dos en madera. El más barato cuesta $ 91.464, y el más caro, aproximadamente $1,5 millón, pero estos precios pueden variar en función de la cotización de los insumos.
Su dueño y presidente, Matías Konstandt, cuenta que el 80% de los domos que vendió la empresa el año pasado fueron para proyectos de glamping. «A partir de la pandemia, se aceleró una nueva forma de hacer turismo que se da a nivel mundial y que implica estar más en contacto con la naturaleza», apunta. Y añade: «La ventaja que tienen los domos es que resuelven una necesidad de vivienda en muy poco tiempo».
Fuente:infobae.com/
Fuente:cronista.com