La Baixada Santista, una de las regiones costeras más visitadas de Brasil, enfrenta una crisis sanitaria que afecta no solo la salud pública, sino también el turismo local. La Secretaría de Salud del Estado de São Paulo lideró una reunión con los secretarios municipales de salud y representantes de vigilancia epidemiológica de los nueve municipios de la región, para abordar los casos de gastroenterocolitis aguda que generaron preocupación entre residentes y turistas.
El equipo técnico estatal destacó la importancia de protocolos rigurosos para recolectar y analizar muestras de agua y alimentos, con el objetivo de identificar las causas de los brotes. “Presentamos a los secretarios y equipos técnicos el flujo de información, la recolección de muestras y los cuidados esenciales frente a esta situación”, indicó Regiane de Paula, coordinadora de la Coordinación de Control de Enfermedades (CCD/SES).
Impacto en el turismo y economía local
La situación sanitaria amenaza la actividad turística en la Baixada Santista, que incluye destinos como Guarujá, Santos e Itanhaém, populares por sus playas y servicios de ocio. La clasificación de ciertas playas como no aptas para el baño por parte de CETESB, junto con el aumento de enfermedades gastrointestinales, generó incertidumbre entre los visitantes, lo que podría repercutir en la economía local, dependiente del turismo.
Representantes del sector hotelero y gastronómico manifestaron preocupación por la caída en las reservas y el descenso en el número de visitantes. Mientras tanto, las autoridades trabajan para implementar medidas de control y prevención, como campañas de concienciación dirigidas tanto a residentes como a turistas.
Medidas preventivas recomendadas
Entre las recomendaciones oficiales para evitar la propagación de enfermedades transmitidas por agua y alimentos, se incluyen:
Evitar playas no aptas: No ingresar al agua si la playa está clasificada como no apta y abstenerse de bañarse en el mar al menos 24 horas después de las lluvias.
Cuidado con los alimentos: Consumir alimentos bien cocidos y mantenerlos refrigerados correctamente.
Higiene personal y del entorno: Lavar las manos antes de comer o preparar alimentos y verificar las condiciones sanitarias de quioscos y restaurantes.
Hidratación y atención médica: En caso de diarrea o malestar, intensificar la ingesta de líquidos y buscar atención médica de ser necesario.
El rol del Instituto Adolfo Lutz
El laboratorio estatal Instituto Adolfo Lutz (IAL) está realizando análisis exhaustivos de las muestras recolectadas en los municipios afectados para identificar el agente causante de los brotes. “Todavía no podemos confirmar el origen del problema, pero estamos trabajando para obtener respuestas lo antes posible”, explicó Regiane de Paula.
Un llamado a la colaboración
Además de la respuesta sanitaria, las autoridades recalcaron la necesidad de colaboración entre los sectores público y privado para garantizar la seguridad de turistas y residentes, minimizando el impacto económico. La implementación de medidas preventivas y la comunicación transparente son claves para superar esta crisis y restaurar la confianza en la Baixada Santista como un destino turístico seguro y atractivo.
