Los municipios de Valencia que fueron devastados por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) comienzan a mostrar signos de recuperación, después de días de incomunicación y caos. La acción conjunta de miles de voluntarios y profesionales fue clave para limpiar los escombros, retirar vehículos apilados por la corriente y devolver la normalidad a estas localidades, que vivieron una de las mayores tragedias del siglo en España.
Según la Generalitat Valenciana, el costo de reconstrucción se estima en 31.000 millones de euros, una cifra que refleja la magnitud del desastre en las 75 localidades afectadas. Las imágenes de destrucción —barro cubriendo calles, coches apilados como juguetes y viviendas irreconocibles— se están transformando, poco a poco, en paisajes de esperanza gracias a los esfuerzos de reconstrucción.
Profesionales de la fotografía regresaron a los mismos escenarios donde ocurrieron los momentos más críticos del temporal para captar el contraste entre el antes y el después, reflejando la fuerza y determinación de los vecinos.
Pese a los esfuerzos, el balance sigue siendo devastador: 222 fallecidos, decenas de desaparecidos, y miles de familias que lamentablemente perdieron sus hogares. Sin embargo, la solidaridad y el trabajo conjunto destacan como el motor que impulsa la reconstrucción y recuperación emocional de los afectados.
Los testimonios de los vecinos, que agradecen la ayuda recibida de toda España, son un recordatorio del impacto humano de esta tragedia. Aunque el camino hacia la recuperación total es largo, el espíritu resiliente de estas comunidades permite vislumbrar un futuro más esperanzador.