En un importante encuentro realizado en el marco de FITUR 2025, Málaga y Playa del Carmen sellaron un hermanamiento que promete abrir nuevas puertas hacia la cooperación cultural, tecnológica y turística. Este acuerdo, firmado por las autoridades de ambas ciudades, subraya el interés compartido por fomentar la transferencia de conocimientos y buenas prácticas en el ámbito del turismo, además de promover la sostenibilidad como eje central del desarrollo.
Málaga, reconocida como un centro tecnológico y empresarial líder en el sur de Europa, ve en este hermanamiento una oportunidad para fortalecer sus lazos internacionales y contribuir al desarrollo económico y cultural conjunto. Por su parte, Playa del Carmen, uno de los destinos turísticos más relevantes de México, aporta su vasta experiencia en hospitalidad y servicios turísticos, sectores que generan más de 2.288 millones de dólares anuales gracias a sus más de 1,6 millones de visitantes al año.
El acuerdo también busca impulsar proyectos tecnológicos y sostenibles, así como campañas conjuntas que promuevan la proyección internacional de ambas ciudades. La idea es construir una relación que combine innovación, cuidado del entorno natural y un fuerte énfasis en el intercambio cultural y educativo.
Una nueva identidad para Playa del Carmen
Playa del Carmen no solo celebra este hermanamiento, sino que también da un paso significativo en la consolidación de su identidad con el lanzamiento de su Marca Ciudad. Este proyecto, liderado por la Secretaría de Turismo local, busca reflejar la riqueza cultural y natural del destino, resaltando su herencia maya y su vibrante pluralidad.
La creación de esta identidad involucró a 70 representantes de diversos sectores, denominados «Guardianes de la Ciudad». Ellos contribuyeron al diseño de los valores, colores, pictogramas y narrativa histórica que forman parte de esta nueva marca, concebida para perdurar en el tiempo y fortalecer el sentido de pertenencia de los habitantes.
Con esta iniciativa, Playa del Carmen reafirma su posición como el corazón de la Riviera Maya, destacándose no solo por sus espectaculares playas de arena blanca y aguas cristalinas, sino también por su historia y cultura, que siguen cautivando a millones de visitantes cada año.
En conjunto, Málaga y Playa del Carmen se proyectan hacia el futuro como socios estratégicos en la búsqueda de un turismo más inclusivo, innovador y sostenible. Este hermanamiento es un claro ejemplo de cómo dos ciudades pueden unir fuerzas para construir un legado que beneficie tanto a sus ciudadanos como a sus visitantes.
