La comunidad de El Rodadero, en Santa Marta, Colombia, está preocupada por la disminución del turismo y los problemas que afectan la zona.
Residentes locales expresaron su inquietud por la falta de promoción turística y la actitud desmotivada hacia los visitantes, así como por la falta de empatía de los funcionarios locales. Además, señalaron problemas con la recolección de basura y la presencia de vendedores informales, lo que ha contribuido a un ambiente de desorden en la zona.
Los comerciantes locales también han experimentado una disminución en sus ingresos, con una producción reducida debido a la situación con los vendedores ambulantes. Además, hubo rumores sobre la posible eliminación de las ollas comunales, lo que generó preocupación en la comunidad.
La vigilancia se ha centrado en áreas donde residen personas de estratos más altos, dejando otras áreas menos atendidas, según los residentes.
El alcalde Carlos Pinedo ha estado trabajando para abordar estos problemas, recorriendo las playas de Cabo Tortuga y Pozos Colorados para verificar el orden en esas áreas. Aunque se reconoce su voluntad política y liderazgo, algunos problemas persisten, como el ruido y la presencia de vendedores en la playa de Bello Horizonte.
La comunidad está pidiendo una mayor organización y atención a estos problemas para restaurar el orden y atraer a los turistas de nuevo a El Rodadero y otras áreas turísticas de Santa Marta.
Fuente: diariolalibertad.com
