Por Jon Guezala
A juzgar por las cifras turísticas que los hoteles de Irun y Hondarribia, han registrado este verano una ocupación hotelera que ascendió al 98% en Hondarribia y al 97% en Irún durante el mes de agosto, rozando el lleno. Esto supone ya no solo una mejoría con respecto al mismo periodo del año anterior, sino también con respecto a los datos prepandemia de 2019 (ocho puntos porcentuales más en Hondarribia y siete en Irun).
Hondarribia es una ciudad y municipio del País Vasco en España que está situado en el extremo noreste de la provincia de Guipúzcoa, a unos 20 km al este de la capital, San Sebastián, en la desembocadura del río Bidasoa, que hace de frontera natural con Hendaya (Francia).
Con esta ubicación privilegiada, indicaron desde la agencia de desarrollo de la comarca, Bidasoa Activa, que se congratulaban esta semana por los datos registrados.
En este sentido, la vicepresidenta, María Serrano dijo que “alcanzar estos datos de ocupación e ir recuperando los datos del turismo internacional previos a la pandemia son motivos para estar muy satisfechos”, agregando que: si el año pasado hubo un claro ascenso del turismo estatal, este 2022 la afluencia de turistas extranjeros es la que se ha recuperado e incluso reforzado.
En Irun, los datos de ocupación hotelera son de récord, superando la cifra más alta hasta el momento, la del 2019. María Fernández, de Hotel Atalaia, asegura que “ha sido un verano maravilloso”. Según los datos de ocupación del propio Atalaia “no ha habido otro igual”, en palabras de su responsable.
Los hoteles hondarribiarras también tuvieron que colgar el cartel de “completo” en más de una jornada el último mes. Según Juan Calduch, de la casa rural Mendilore, los visitantes que han escogido Hondarribia como su destino han venido este verano “a disfrutar de nuestro entorno, gastronomía y cultura”.
Las instalaciones culturales de la comarca no se quedaron atrás. El museo Oiasso recibió durante estas vacaciones (entre junio y agosto) 10.768 visitantes, superando los resultados del mismo periodo del año 2021 en más de un 60%. Además se calcula que unas 4.000 personas disfrutaron del festival Dies Oiassonis.
En cuanto a la procedencia de los turistas, destaca la vuelta de los visitantes franceses, cuya afluencia se ha multiplicado por tres, pero también de los estatales, alemanes, belgas e ingleses.
Fuente:noticiasdegipuzkoa.eus/
