El Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol se prepara para una transformación significativa con un ambicioso proyecto de ampliación que casi duplicará la superficie actual del área terminal, pasando de 80.000 a 140.000 m². Aena, el gestor aeroportuario, presentó esta propuesta a las autoridades locales, con el objetivo de optimizar la capacidad operativa y la calidad del servicio.
El plan contempla la demolición de la antigua Terminal 1 y de los diques B y C, y prevé la construcción de un nuevo dique para vuelos no Schengen, con un sistema de control de fronteras centralizado. Además, se incluirán mejoras en el tratamiento de equipajes, control de seguridad y nuevas posiciones de contacto para aeronaves.
También se proyecta una expansión de las áreas comerciales y salas VIP dentro del aeropuerto, con incrementos del 41% y 43% respectivamente. En el campo de vuelo, se sumarán nuevas calles de rodaje para facilitar el movimiento de aeronaves.La obra forma parte del próximo ciclo del Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA III), que comenzará en 2027. El rediseño no solo busca responder al crecimiento de la demanda, sino también posicionar a Málaga como un hub clave para el turismo en el sur de Europa.
