Viajar por el mundo en buena compañía ahora es posible, incluso si los planes con amigos fallan. Así surge el «social travelling», una tendencia creada especialmente para los millennials.
Con el paso de los años, las responsabilidades y las dificultades para organizar vacaciones con amigos aumentan. Las fechas no coinciden, las prioridades cambian y los destinos no siempre llegan a un buen acuerdo. Ante esta situación, muchos eligen por viajar en soledad, aunque esta no sea la opción más deseada.
Ante este problema, el ingenio se hizo presente para unos emprendedores turísticos, quienes crearon una solución innovadora, allá por 2019. Fernando Cerro y Roberto Castelli fundaron Huakai, una propuesta sencilla pero revolucionaria: juntar a millennials con el mismo deseo de viajar y crear experiencias únicas. Nacciendo así el «social travelling».
Como una formula mágica, se ofrece viajar con desconocidos. Actualmente, se cree que más de 10,000 personas ya han experimentado esta nueva forma de viajar. Huakai convirtió el deseo de viajar en una experiencia adictiva, donde los participantes conocen la fecha y el destino, pero no a sus compañeros de viaje. La empresa se encarga de todo: elegir hoteles, planificar rutas singulares y formar grupos de viajeros.
Conexiones humanas y grupos segmentados
El éxito de esta tendencia se basa en dos pilares: armar grupos pequeños y segmentarlos por edad. Lo que asegura que los viajeros, que se encuentran en momentos vitales similares, conecten mejor y compartan intereses y gustos. Las relaciones que se forman durante el viaje son cuidadas de manera especial, fomentando vínculos que perduran más allá del viaje.
Generalmente estos viajes se caracterizan por ser guiados por coordinadores, no por guías turísticos convencionales. Estos coordinadores se comportan como amigos aventureros, extrovertidos y resolutivos, asegurando que cada detalle esté bajo control y creando una atmósfera única para los viajeros.
Social Travelling y la tecnología
Viajar siempre ha sido una actividad social, pero con la irrupción de las redes sociales, esta experiencia se ha ampliado y compartido de manera global. Ahora, gracias a los smartphones y la web 2.0, los viajeros pueden planificar, compartir y disfrutar de sus viajes de una manera más auténtica y local. Según estudios recientes, un gran porcentaje de personas utiliza Internet como principal fuente de información para planificar sus viajes y basa sus decisiones en las experiencias y recomendaciones de otros viajeros.
El turista 2.0
La tecnología transformó al turista en un ser más conectado y social. Ahora, se puede relatar el viaje en tiempo real, buscar recomendaciones de restaurantes y lugares de interés, y compartir cada momento con una comunidad global. Este turista 2.0 quiere vivir su viaje de manera significativa y, sobre todo, compartirlo.
El «social travelling» es la respuesta perfecta para aquellos que buscan una experiencia de viaje auténtica, llena de aventuras y nuevas amistades. En concreto, se podría decir que no es necesario viajar solo o esperar a que los amigos tengan tiempo; siempre hay una opción para explorar el mundo en buena compañía.
